El logo es un aspecto fundamental en las labores de marketing de una empresa. Es su bandera, el anagrama con el que se identifican ellos mismos y sus productos. Letras e iconos que, en definitiva, tienen que comunicar de forma breve y directa cuál es la filosofía de la compañía. Y qué complicado es concentrar toda esa información con tan pocos recursos. Por eso resulta curioso echar un vistazo a cómo eran hace algunos años los logos de algunas compañías tecnlógicas, y cuál ha sido su evolución hasta nuestros días.
Por ejemplo, el primer logo de Adobe (los responsables del programa Photoshop entre otros) no tiene nada que ver con el que utilizan actualmente. Aún no llega a los 20 años de existencia y ya se nota el paso del tiempo.
Pocos de los miembros que fundaron Microsoft permanecen aún en las filas de la compañía. Del mismo modo, pocos rasgos conserva la actual tipografía de la marca con respecto a la original de 1975.
Aunque parezca irónico, el primer emblema que utilizó Apple (que en inglés significa “manzana”) no tenía nada que ver con el actual, sino que era una especie de grabado en el que aparecía Isaac Newton. Más tarde simplificaron su estilo con la famosa fruta en versión multicolor diseñada por Rob Janoff, hasta llegar al actual logo con el elegante color plateado que impera en sus productos. Por cierto, el mordisco surgió de un juego de palabras entre el término informático “byte” y el vocablo “bite” (“mordisco” en castellano), correspondiente a la campaña publicitaria de Apple por aquel entonces.
¿El emblema de Nokia era un pez? Sí, el fabricante líder mundial en telefonía móvil utilizaba este singular icono en sus productos. Lo que ocurre es que, antes de introducirse en el negocio de las telecomunicaciones, la compañía finlandesa se había dedicado a la fabricación de bicicletas, neumáticos, productos de papel, zapatos, televisores o generadores eléctricos entre otros sectores. La de vueltas que da la vida.
Canon sí continua desarrollando su actividad en el mismo sector que cuando se fundó: las cámaras de fotos. No obstante, su primer icono identificativo fue la bodhisattva budista de la piedad Kwanon. Más tarde cambiaría el nombre por el de Canon, que se pronuncia exactamente igual pero al mismo tiempo alude al concepto de precisión.
Hace 80 años Paul Galvin fundó su propia empresa, a la que dos años más tarde renombró como Motorola cuando empezó a dedicarse a la fabricación de radios para coches. Actualmente la compañía vive uno de sus peores momentos económicos, por lo que algún internauta con mucha ironía ha propuesto la imagen inferior que os mostramos abajo como nuevo emblema (a modo de “corazón partío”).
Otras compañías como Xerox (sus logos están al principio del artículo), Palm o IBM también han alterado sus logos a lo largo de los años, hasta el punto de que son casi irreconocibles partiendo de los originales.
En nuestro viaje al pasado de internet ya vimos como había sido la evolución del logo de Google.
Y para el final hemos dejado al navegador web Firefox, que en sólo 6 años de existencia ya ha variado su símbolo de identificación. La razón es que en sus comienzos el “zorro de fuego” (Firefox) iba a ser realmente un ave fénix (Phoenix), pero por conflictos legales con un programa ya existente se decantaron por la opción que hoy en día conocemos.
Tras este curiso viaje, seguro que a más de uno le pica la curiosidad por saber cómo serán los logos del futuro. No hay forma de que podamos intuir cuál será su aspecto el día de mañana, pero de algún modo podemos aventurar una cosa: seguro que tampoco se parecerán en nada a los actuales.
Vía: Los mundos de Mou
Coño!!. No había visto esto… justo debió coincidir con el viaje a paris-praga-viena y por eso no os visité, he entrado desde mis estadísticas.
Gracias 🙂
P.D: como se nota quien es un profesional (vosotros) y quien un simple aficionado (yo). Os ha quedado muy chulo.