Todos los portátiles MP3 con microdisco duro (incluyendo los últimos iPods con 80 y 160 gigas) han aumentado su capacidad gracias a las investigaciones de dos científicos europeos.
Son el francés Albert Fert y al alemán Peter Grí¼enberg, que acaban de ser galardonados con el Premio Nobel de Física 2007 por descubrir la tecnología GMR (magnetorresistencia gigante).
En 1988 estos dos investigadores, cada uno por su lado, descubrieron que el magnetismo influia directamente sobre la densidad de información de un disco duro. Es decir, la cantidad de bytes que podemos meter en su superficie óptica.
Al aplicar estos conocimientos, crearon y patentaron unos cabezales de lectura especiales, que han acabado incorporando muchas de las firmas que fabrican reproductores portátiles de alta capacidad. Es decir, aparatos que no recurren a la memoria flash, sino a un disco duro de pequeñas dimensiones. Así ganan espacio suficiente para incluir más música y, sobre todo, vídeos, que ocupan bastante más espacio que un archivo MP3.
La Fundación Nobel ha concedido a Fert y Grí¼enberg este galardón, premiado con 1,5 millones de dólares, por contribuir enormemente a la «miniaturización radical de los discos duros en los últimos años», en lo que constituye «una de las primeras aplicaciones reales del prometedor campo de la nanotecnología«.
Hace poco más de una década, los discos duros de ordenador tenían una capacidad irrisoria. Hoy, podemos almacenar miles de canciones y cientos de películas en aparatos de bolsillo. Y la cosa parece que va en aumento. Así que nada: larga vida a la magnetorresistencia gigante, aunque suene a una enfermedad rara, chunga y un poco friki.
Foto: Fundación Nobel
Vía: engadget