Si hay una industria a la que no le ha afectado lo más mínimo esto de la crisis es a la industria del porno. Es más, puede que hasta le haya beneficiado, porque si hay algo que puede llegar a ser económico es eso de darse placer a uno mismo, en la intimidad de su casa. Y porno puede uno tener a espuertas, en Internet, todo el que quiera, y gratis. Eso es un secreto a voces. Y la tecnología siempre le echa una mirada al campo de las películas para adultos, pues toda innovación que acerque el cuerpo desnudo a la mirada libidinosa, tanto mejor. Cuanto más real, más placentera resultará la experiencia.
Hace un tiempo os hablábamos de cómo una popular página especializada en show de porno en vivo a través de webcam estaba desarrollando un software para ofrecer el contenido a través de imágenes holográficas. Estar en la intimidad de tu casa y acceder a una imagen en holograma de tu actriz porno favorita es algo con lo que muchos han soñado y que, ahora, por fin, está a su alcance. Pero, ¿Y si uno no puede hacerlo en casa? O le gusta acudir a cabinas de sex-shop… ¿Por qué no acudir a una tienda para adultos cuyas cabinas estén acondicionadas para lo último?
Realidad (e intimidad) Virtual
Donde si no en Japón ya es posible ver porno en realidad virtual en una de las habitaciones que alquila la tienda, de sugerente nombre, Soft on Demand, más concretamente en Tokyo. Justo en el mismo distrito de Akihabara, un barrio muy conocido por los aficionados a los videojuegos y al anime debido a la proliferación de tiendas del ramo que se encuentran situados entre sus edificios. Cada habitación cuenta con un PC y abundante material pornográfico listo para ser consumido en realidad virtual
Soft on Demand se encuentra ahora mismo sumergido en la apertura de este nuevo servicio de alquiler de habitaciones para el porno en realidad virtual, ofreciendo a sus visitantes la oportunidad de ofrecer el servicio gratis antes de que comience el servicio definitivamente, que, claro, ya sería de pago. Según aseguran desde la misma tienda, las habitaciones estarían completamente equipadas para satisfacer el confort del usuario, totalmente insonorizadas, para que así los oídos vecinos e indiscretos no puedan hacer de las suyas.
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¿Cuánto cuesta el servicio?
Alquilar una habitación para consumir porno y realidad virtual le costaría aproximadamente 550 yenes la hora (unos 5 euros la hora al cambio). Si tienes tiempo, es tu día libre, y te lo quieres dedicar para ti solo, puedes optar por alquiler la habitación por un día entero. ¿A cuanto sale el servicio diario? Pues deberás desembolsar unos 3.150 yenes (menos de 30 euros).
Soft on Demand se apunta el tanto de ser la primera instalación en alquilar habitaciones con porno en realidad virtual. En tu próximo viaje a Japón, puede que no te venga mal un paseo por Tokyo y, quien sabe, otro por el barrio de Akihabara. ¿Por donde Soft on Demand, perdone?
via | The Next Web
