Japón quiere ser el referente mundial en tecnología, es decir, quieren albergar de nuevo al ordenador más rápido del mundo como ya hicieron años atrás. Su intención es desbancar a China dentro de muy poco, con lo que ya están trabajando en el desarrollo de la máquina más potente a la que podamos tener acceso.
No se trata de un capricho para demostrar su poder y punto, ya que es una respuesta a las redes neuronales y al aprendizaje automático, puesto que ambas necesitan una capacidad de cálculo muy superior de lo que pueden contar ahora, con lo que realmente existe una demanda en lo que a este tipo de superordenadores se refiere.
Será un equipo, además, dirigido a fabricantes japoneses ya que les podrá servir en el desarrollo de coches autónomos, robots o hasta diagnósticos de salud. Sus cálculos serán un gran soporte para la Inteligencia Artificial y las redes neuronales que comentábamos anteriormente. Su capacidad de análisis de datos se antoja fundamental.
Igual que cuando estudiábamos, se puede hacer para sacar un suficiente o para aspirar a la matrícula de honor, y en eso Japón quiere demostrar que es un estudiante lo más aplicado posible. Así ha sido como el director del Instituto Nacional de Ciencia Industrial Avanzada tiene un objetivo muy claro marcado en su libreta de cosas por hacer. Su idea no es otra que desarrollar el superordenador más potente del mundo y dejando mucha diferencia con el segundo. Justamente para hacer todo lo indicado en cuanto a servir de ayuda para las empresas tecnológicas.
El planteamiento es que este superordenador sea capaz de hacer 130.000 billones de operaciones por segundo. Te aconsejamos que lo mejor es que vuelvas a leer este dato: 130.000 billones de operaciones por segunda, una verdadera barbaridad y que ya supone un incremento espectacular sobre lo que se podía realizar tan solo tres o cuatro años atrás.
Para llevar a cabo semejante logro, la potencia que deberá tener es de 130 petaflops -un petaflop equivale a 1,000,000,000,000,000 operaciones de coma flotante por segundo-. Ahora mismo, el equipo más potente del mundo -el Sunway TaihuLight- tiene 93 petaflops. Este equipo es chino, con unos 10.649.000 núcleos. Y cuando solo lleva unos meses con la denominación de ser el ordenador más potente del mundo, desde Japón quieren sacarle ese cetro cuanto antes.
Para llevar a cabo el desarrollo del que será el ordenador más potente del planeta, la inversión será de unos 160 mllones de euros. Un presupuesto muy elevado con el que desde Japón esperan dar un golpe encima de la mesa en el sector de tecnología, donde tiempo atrás han sido el referente.
K, cuando Japón tuvo el superordenador más potente del mundo
En 2011 apareció «K», el superordenador con el que Japón destronaba a China. Un equipo que era tres veces más rápido que su antecesor -llamado Tianhe-1A-, siendo desarrollado por Fujitsu. De hecho, consiguió el trono al ser el único que podía hacer 8.2 petaflops de operaciones por segundo. Lo que sería así como un millón de ordenadores de escritorio de su época a la vez. Algo que ahora mismo queda alejadísimo del objetivo japonés, que su nuevo equipo llegue a los 130 petaflops.
