Rebuscando por Internet nos hemos topado con un vídeo tutorial que, teóricamente, te enseña cómo convertir un cargador de un teléfono móvil de toda al vida en un cargador inalámbrico. Un vídeo que nos enseña en unos pasos breves y sencillos (y un poco escuetos) en transformar el cable y el adaptador que vienen con el teléfono, al estilo MacGyver, con un poco de cinta, en una cargador que suministra energía al teléfono desde casi cien metros de distancia.
A estas alturas y antes de que pongas rumbo a la ferretería, te advertimos de que en tuexperto aun no hemos probado el invento y que, evidentemente, no tenemos nada que ver el vídeo. Así que si te metes en harina, lo haces bajo tu responsabilidad. Eso sí, si te sale bien no dudes en grabarte en vídeo y enviárnoslo.
Como hemos dicho, al más puro estilo MacGyver, la solo necesitas un par de cosas de andar por casa para convertir tu cargador de toda la vida en uno inalámbrico: un poco de cinta aislante, un pequeño rollo de cobre, un trozo de papel de aluminio, un pequeño imán y pegamento.
El primer paso es el más drástico, así que si te sale mal tampoco tendrás que cabrearte demasiado porque hará ya un buen rato que te cargaste el cargador. Cortas el cable unos diez centímetros por cada extremo y desechas el resto. Acto seguido procedes a pelar el cable, retirar el aislante y de los tres hilos que encontrarás dentro, procede a eliminar de raíz el de color amarillo y verde (que suele asociarse con la toma de tierra). Pela los otros a una altura de unos cinco centímetros. Una vez hayas concluido con el tema de los cables, utiliza un poco de cola para pegar el imán al adaptador en la parte opuesta a la del enchufe.
Ya habiendo acabado con la fase de preparación, procedemos a la parte MacGyver. Primero envuelve cada cable con un papel de aluminio. Luego toma un poco de cobre del rollo homónimo y, extrayendo tan solo un pelo del mismo, corta lo suficiente como para que el papel quede bien enrollado de cobre.
Ahora toma la cinta y enrolla completamente anterior. Vuelve a coger el cable de cobre y enrolla toda la superficie que has cubierto con la cinta americana. Por este orden: papel de aluminio, cobre, cinta americana y más cobre. El creador del tutorial parece hacer un poco arbitrariamente, así que parece que se hace un poco a ojo.
Con esto y un enchufe tu apaño casero para tener un cargador wireless ya debería de estar listo para funcionar. Conecta la parte del cargador al enchufe, la otra a tu terminal y en teoría, siempre en teoría, tendrás un cargador que rellena tu batería desde una distancia superior a los 25 metros. Pudiendo incluso llegar a cien.
La gente que ha subido este vídeo es experta en su canal en realizar pequeñas ñapas de carácter tecnológico. Aun así maniobra con sumo cuidado.
Ni se os ocurra hacer eso, solo acabareis teniendo que comprar un cargador nuevo.
pues tienes toda la razon no sirveeeeeeeeeeeeeeeeeee
es mas seguro conectar un par de cables de cobre a un patata o a un limon y seguro obtienes mejores resultados.
Esto es un gran FAKE, se dice que esta carga inalámbrica tiene un alcance de 25 metros. 25 metros para una tecnología que todavía se mueve por debajo de los cinco centímetros, el estándar de carga inalámbrica más famoso, el Qi, tiene un alcance de cuatro”¦ ¡centímetros!
ni se te ocurra seguir el procedimiento del vídeo, porque lo más probable es que termines en el hospital con una quemadura en las manos.