Jazztel ha anunciado de madrugada que ha sido adquirida por Orange por 3.300 millones de euros. Esto supone que comprará el 100 por cien del capital por un valor de trece euros la acción, en una Oferta Pública Voluntaria (OPV) que se dará a conocer en la apertura de mercados. Asimismo, esta situación implica una prima del 8,33 por ciento con respecto a los 12,04 euros que marcaba al cierre de la bolsa lunes.
Según ha confirmado el comunicado del operador español a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) estaría condicionada «a la obtención de las aprobaciones regulatorias pertinentes y a la aceptación del 50,01 por ciento del capital social, sin computar las acciones de Leopoldo Fernández Pujals y otras acciones con respecto a las que se acepte irrevocablemente la oferta; y a que no resulte aprobada por los órganos de gobierno de la sociedad una operación corporativa para la posible adquisición de Yoigo«.
En el informe que han mandado se explica que Leopoldo Fernández Pujals, que hasta ahora poseía un 14,48% del capital de Jazztel, se ha comprometido a «aceptar de forma irrevocable la oferta de Orange». Asimismo, José Miguel García Fernández, CEO de la empresa, y José Ortiz Martínez, consejero secretario general, también han asumido aceptar la compra en los mismos términos.
De hecho, las alegrías han llegado hasta Twitter. Stéphane Richard se ha mostrado “ilusionado con combinar los negocios de Orange y Jazztel en España en beneficio de nuestros clientes”. Así lo confirmaba el directivo en la red social a todos sus seguidores.
Esta operación no nos pilla de sorpresa. A media tarde del lunes, las acciones de Jazztel comenzaron a subir hasta un 12,57 por ciento, llegando a valer hasta 12,04 euros, mientras que las de competidores como Telefónica disminuían su valor poco a poco. Fue entonces cuando la CNMV decidió suspender la cotización de la empresa por “concurrir circunstancias que pudieran perturbar el normal desarrollo de las operaciones sobre los citados valores”.
De esta forma, Jazztel se une a la ola de compras y absorciones que acecha el mercado de las telecomunicaciones. Orange, filial de France Telecom, era prácticamente la única opción que tenía la empresa española como comprador. Por otro lado, la compañía de Richard tampoco tenía muchas más alternativas para intentar disminuir la distancia que les separa de Telefónica y Vodafone.
La suma de Orange y Jazztel le supondrá a la multinacional 12,7 millones de usuarios móviles, que se quedan por detrás de los 14 millones de clientes de telefonía los que cuenta Vodafone y muy lejos de los 19 millones de consumidores de este tipo con los que cuenta Telefónica.
En lo que va de año, las acciones de Jazztel han subido casi un 30 por ciento y en los últimos doce meses ha alcanzado una revalorización de un 53,06 por ciento. Quizás sea porque, tras la compra de Ono por parte de Vodafone en abril, los inversores han decidido apostar por la compañía haciendo caso omiso del supuesto desinterés de Orange.
Pero, ¿Y los clientes? Se espera que Orange mantenga durante un tiempo Jazztel. A pesar de todo, los primeros beneficiados serán ellos, ya que podrán contar con cobertura 4G y, seguramente, mejorará la rapidez en la implantación de fibra óptica.
