De acuerdo con un reportaje publicado en una web china, tanto el iPhone 6 de 4,7 pulgadas como el de 5,5 pulgadas se lanzarán el 25 de septiembre. Esto contradice lo que afirmó hace unos meses el operador alemán Deutsche Telekom, que aseguraba que los nuevos dispositivos de Apple saldrían al mercado el día 19 de ese mismo mes.
Otro rumor que ha estado sobrevolando el sector tecnológico es que la versión del iPhone 6 de pantalla de 5,5 pulgada se llamará Apple Air. Además, se sabe que en China, el de 4,7 pulgadas se venderá a un precio de 625 euros y su hermano mayor tendrá un coste de 710 euros.
Por su parte, Bloomberg ha asegurado que los nuevos iPhones serán más redondeado y más delgados que los smartphones anteriores de la multinacional. Además, contarán con sensores que puedan ayudar a mejorar el cuidado del cuerpo. Esto no sería extraño ya que la compañía de Cupertino lanzó a principios de junio Health, una nueva aplicación relacionada con la salud que causó muy buena impresión en su presentación.
Esta app estaría dentro del nuevo sistema operativo de Apple, iOS 8, con el que también contarán estos terminales. En ambos casos, tendrán un cristal zafiro para proteger su pantalla, disminuyendo el impacto de golpes o arañazos que puedan dañar los dispositivos. Por si fuera poco, también se dice que contarán con una cámara de ocho megapíxeles con las que podrás hacer fotos in preocuparte por la calidad.
Se dice que contarán con un procesador A8 para que no tengas problemas a la hora de ejecutar juegos o realizar alguna operación. En cuanto a su exterior, tendrán una carcasa de metal e incluirían una serie de botones físicos más uno adicional, justo por encima de la nano SIM. Este nuevo interruptor serviría para apagar o encender el terminal.
Además, y como no podía ser de otra forma, tendrán conexiones 4G para no tener problemas con la velocidad de carga a la hora de navegar por Internet. El modelo que tiene una pantalla mayor se dice que llegaría con una avanzado estabilizador óptico de imagen (OIS), una función que no veríamos en su versión más pequeña de 4,7 pulgadas. Éste último contaría con un sistema central compuesto por un motor de bobina, un mecanismo que hemos visto en el iPhone durante los últimos cinco años.
A diferencia de este sistema, la estabilización óptica se encarga de controlar de forma mecánica la trayectoria de la luz mientras viaja desde la lente hacia el sensor. En cualquier caso, el objetivo de Apple sería marcar la diferencia entre sus dos modelos.
De esta forma, su versión superior sería capaz de ofrecer una mejor calidad de imagen en las fotografías, por lo que el equipo sería una apuesta por entrar, de nuevo, en el mercado de la alta gama. No obstante, esto no implica que estos terminales puedan superar a otros que se han lanzado recientemente, como el Sony Xperia Z2, el esperado Z3 o el Samsung Galaxy S5. Sin embargo, tendremos que esperar hasta septiembre para saber si todos estos rumores son ciertos.