Los coreanos de Samsung han llegado a la feria de tecnología de Las Vegas (CES 2013) con ganas de enseñar productos nuevos. Una gama completa de productos entre los que se incluyen seis cámaras fotográficas. Las pequeñas Samsung DV150F y ST150F son modelos básicos, aunque la marca las ha dotado de prestaciones muy interesantes. Son prácticamente iguales entre sí, exceptuando la pantalla frontal.
Y es que la Samsung DV150F incluye una pantalla en la parte delantera para realizar autorretratos. No es una idea nueva, ya la habíamos visto en modelos con más de un año de antiguedad, pero parece que la fórmula ha funcionado, y Samsung ha querido mantener al menos una de estas cámaras en su catálogo.
Los autorretratos hacen furor en las redes sociales, y contar con una pantalla en la parte frontal de la cámara facilita enormemente su realización. Es una manera divertida de tomar fotos con amigos sin tener que recurrir a un espejo o dejar la cámara en manos de desconocidos. Las características técnicas son prácticamente iguales entre ambas cámaras a excepción de esta pantalla y un ligero cambio de tamaño en la pantalla trasera.
Por lo demás, cuentan con un sensor de 16,2 megapíxeles, más que suficiente para la mayoría de los usuarios. El objetivo es tipo zoom con cinco aumentos, que en fotografía tradicional equivale a un 25 – 125 mm. No son valores espectaculares, pero es que el objetivo de estas cámaras no es ser las más punteras del mercado. La DV150F tiene una pantalla trasera de 2,7 pulgadas, mientras que la de la ST150F crece un poco hasta las tres pulgadas.
Son cámaras compactas de iniciación, con funciones básicas y un funcionamiento completamente automatizado. El usuario no tiene que preocuparse nada más que de encender la cámara y pulsar el botón de disparo. Aun así, cuentan con la función estrella de las cámaras de hoy en día: la conexión WiFi.
Contar con una conexión de este tipo puede cambiar por completo la concepción que tenemos de una cámara de fotos compacta. Y es que lo más les pesa normalmente a estos equipos es la lentitud con la que compartimos las fotos. Hoy en día es muy sencillo tomar una foto con la cámara del móvil y mandársela inmediatamente a un amigo. La calidad no es ni de lejos la que podemos obtener con una de estas compactas, pero la imagen está en segundos en una red social o en el móvil de otra persona.
Por eso Samsung ha decidido integrar la conexión WiFi en toda su gama de cámaras para este 2013. Gracias a ella podemos compartir las fotos si tenemos a mano una de estas conexiones, pero lo más importante es lo que podemos hacer si vinculamos la cámara a un smartphone. De esta manera, podemos utilizar la conexión 3G del móvil para compartir las fotos en cualquier parte o utilizar el móvil como un accesorio de la cámara. Si estamos grabando un vídeo, podemos ver lo que grabamos en la pantalla del móvil, o disparar la cámara a distancia gracias al teléfono.
Los precios que conocemos hasta ahora son lo que van a tener en Estados Unidos, ya que no se ha anunciado la disponibilidad ni lo que van a costar en Europa. Al otro lado del Atlántico la Samsung ST130F constará unos 130 dólares, mientras que la DV150F costará un poco más, alcanzando los 150.