Si hay algo que estaba en boca de todos, días después de la ceremonia inaugural de lo Juegos Olímpicos de Pekín, era lo maravillosos que habían sido los fuegos artificiales. Si los vieron in situ, razón no les faltaba. Ahora bien, si disfrutaron de ellos desde el sofá, la cosa cambia, y mucho. Y es que la organización ha admitido que las huellas luminosas que aparecieron sobre la ciudad y que terminaban en el estadio, estaban especialmente hechas para la televisión con CGI, o lo que es lo mismo, con imágenes generadas por computadora.
Pues bien, las 29 huellas que aparecieron sobre la ciudad de Pekín surcadas por una cámara aérea, eran completamente falsas. Un equipo de profesionales, con el director de cine Zhang Yimou al mando, trabajó incansablemente durante un año para crear una película de 55 segundos que sería retransmitida por televisión. Por lo visto, se puso especial interés en destacar el humo de los fuegos, para dar más realismo al asunto. De hecho, nadie lo notó hasta que el equipo dio la noticia, orgulloso de como habían quedado los fuegos falsos.
Las imágenes se crearon para no poner en peligro a un profesional que grabara los fuegos en helicóptero desde esa perspectiva. Muy humanitario por su parte, aunque este detalle contrasta con otras falsedades que se dieron en la ceremonia inaugural. Una de ellas tiene que ver con la popular historia de Yang Peiyi, la niña que, según los organizadores de Pekín 2008, tenía la cara demasiado redonda y los dientes descolocados como para salir a cantar «La Oda a la madre patria». Por este motivo, colocaron a otra niña llamada Lin Miyaoke que realizó su labor de karaoke, y que sí cumplía con los supuestos cánones de belleza.
Por suerte, esta vez no ha valido aquello de que las apariencias engañan, aunque parece que en China no les importa nada confesar estas mentirijillas. No queremos ni imaginarnos cómo nos hubiera puesto a nosotros la opinión internacional, de ser falsa la popular encendida del pebetero olímpico por Antonio Rebollo, en Barcelona 92. Menos mal que inventos como la Divecam son ciertos. Al menos hasta que nadie lo desmienta.
Vía: Dvice
Pues yo oí a un organizador de Barcelona 92 que la escena de la flecha también tenía su truco, ya que la flecha no podía caer dentro del pebetero para no dañar ni las tuberías ni los quemadores de gas, así que la flecha pasó bastante más lejos del pebetero de lo que se deduce de las imágenes. Por supuesto, había "iniciadores" del fuego para el caso en que el viento o los nervios hubieran desviado la flecha.
Es que la escena de la flecha fue falsa, informate. Tanto criticar a los chinos para despues decir eso …