Nokia acaba de lanzar un nuevo modelo de su lujosa gama Carbon. Y es que, si por algo se caracteriza esta compañía, es por la variedad de modelos y múltiples diseños con que inunda el mercado. Esta vez, nos presentan una variante más del Nokia 8800, a la que han llamado Carbon Arte, y que sin duda constituye un auténtico paso adelante en diseño y distinción, eso sí, a la altura de bolsillos exclusivos.
Una de las novedades que caracteriza este nuevo modelo son los materiales con los que está hecho el terminal. Para obtener una carcasa tan elegante, se ha utilizado fibra de carbono, titanio, cristal y aluminio, materiales que, sin duda, lo harán mucho más resistente. La pantalla, además, lleva una capa protectora que evitará las odiosas huellas sobre el cristal.
Pero los que todavía creían que la belleza estaba en el interior, es posible que se lleven una gran decepción con el Carbon Arte. Y es que resulta que, a pesar de tanto lujo en los detalles externos, sus cualidades técnicas parecen no estar a la altura. Estaríamos hablando de un terminal 3G con cámara integrada, de 3,2 discretos megapíxeles. Lo salvan sus 4 GB de memoria interna y una pantalla OLED de 16 millones de colores con una resolución de 240x320px.
Por lo demás, el Carbon Arte es capaz de reproducir música y vídeo en distintos formatos e incluye todos los básicos de los móviles de hoy. Eso sí, se han marcado detalles como el de ver la hora con sólo tocar la pantalla o incluso el de silenciar el teléfono girando el terminal al revés. Respecto al peso, se queda en los 150 gramos. Los que puedan permitírselo, lo tendrán disponible a finales de este año por la nada despreciable cifra de 1.100 euros.