Microsoft no aprende. Y el Tribunal de la Unión Europea le ha cogido gustillo a ponerle multas astronómicas, la última de 899 millones de euros. El motivo: cobrar un precio excesivo por la información que proporciona a otros fabricantes de equipos y programas para que éstos sean compatibles con Windows. Y lo peor es que es un caso de reincidencia.
Ya en 2004 Bruselas le impuso a la compañía de las ventanas una multa, confirmada en septiembre del año pasado, por valor de 497 millones de euros. Una cifra a pagar por abuso de posición dominante en el mercado. En julio de 2006 le cayó otra sanción de 280,5 millones de euros precísamente por no ofrecer datos de compatibilidad a otras empresas. Y de nuevo vuelve a repetirse la historia.
Así pues, el desembolso de la compañía fundada por Bill Gates asciende ya a 1.678,5 milloncejos de nada. Y todo, según el Tribunal de la UE, por no proporcionar información sobre compatibilidad «en condiciones razonables y no discriminatorias». A pesar de los avisos y las sanciones previas, Microsoft sigue erre que erre.
Los de Redmond se defienden argumentando que la situación ha cambiado con el paso de los años, y que cada vez colaboran más estrechamente con otras firmas e invierten más dinero en investigación.
Pero para Neelie Kroes, Comisaria Europea para la Competencia, «no basta con hablar y prometer, hay que cumplir». Algo parecido a lo que ya dijo acerca de la banda ancha española. Pero parece que las grandes empresas siguen sin aprender la lección. ¿Le volverá a caer a Microsoft otra multa? ¿Dentro de cuánto tiempo?
Vía: elmundo