Según G DATA, empresa dedicada a la seguridad de equipos informáticos, para lo que resta de año se esperan unas 10 millones de nuevas amenazas para Windows. Esto choca, directamente, con las mismas cifras que la marca maneja y que hace recuento desde la fecha en la que nació. Ocurría en 2007, hace ahora 10 años, y en este tiempo se hizo un recuento de 133.253 nuevos tipos de virus. Una cifra que, vista hoy y teniendo en cuenta el tamaño de la amenaza que viene, parece absurda. Una misma cifra que se alcanzó ya en los primeros cinco días del primer semestre del año en curso.
Un crecimiento imparable de la ciberamenaza en 2017
En los primeros 6 meses de 2017, los ciberdelincuentes crearon casi 5 millones de amenazas nuevas. Esto supone, comparándolo con el año pasado, un 70% del total de amenazas. Si nos fijamos más de cerca, esto supone más de 27.000 nuevos virus al día o, lo que es lo mismo, un nuevo malware cada 3.2 segundos. Una estadística escalofriante con la que debemos tener en cuenta que ningún equipo, por muy seguro que esté, se encuentra libre de sufrir un ataque cuando menos lo espera. De ahí la importancia de tener el equipo actualizado a la última version de Windows y sus parches de seguridad y disponer en el PC de un buen antivirus.
Para seguir mirando el problema con perspectiva, hemos de añadir que un virus de cada cinco de los que nos enfrentamos diariamente ha sido creado durante los primeros 6 meses de este año. Teniendo en cuenta este ritmo de crecimiento, este 2017 finalizará con unos datos realmente escalofriantes: más de 10 millones de nuevas amenazas. Windows, a día de hoy, es la plataforma más atacada por los cibercriminales, siendo los PUPs (Programas Potencialmente no Deseados) y adawares las amenazas más reiteradas.
Los virus más peligrosos de 2017
2017 será recordado, sin duda, como el año en que sufrió alguno de los ataques más virulentos de la historia. Hacemos un repaso por las amenazas que hicieron temblar los cimientos de algunas de las empresas más poderosas del mundo.
WannaCry
Telefónica tiene la fecha del 12 de mayo marcada con un círculo rojo en el calendario. Otras compañías, también, como Iberdrola y Gas Natural. Un virus ransomware llamado WannaCry, también conocido como WannaCrypt0r 2.0 comenzó a infectar a equipos de todo el mundo, incluyendo las empresas anteriormente citadas, además del servicio de salud británico, el Centro Nacional de Inteligencia y hasta 74 objetivos alrededor del mundo. Este virus ‘secuestraba’ la información contenida en los equipos y pedía un rescate para la liberación de los mismos. Por eso a este tipo de amenazas se las llamada ‘Ransomware’, mezcla de ‘Ransom’, rescate en inglés y ‘Ware’, de ‘Software’, programa en inglés.
WannaCry se aprovechaba de una vulnerabilidad de Windows 10 que ya fue detectada 2 meses antes de que se produjese la infección a escala global. De hecho, los ingenieros de Microsoft, al día siguiente de descubrir la vulnerabilidad, comenzó la distribución de los parches de seguridad, concretamente el día 10 de marzo. Si esos equipos hubiesen estado debidamente actualizados, nada les hubiese ocurrido.
Petya/NotPetya
Un mes y medio más tarde de la aparición de WannaCry, hizo acto de aparición un nuevo ransomware que atacó a 80 empresas de diferentes actividades, localizadas en países como India, Francia, Reino Unido y Estados Unidos. Muchos pensaron que se trataba de una variante de un ransomware detectado en 2016 llamado Petya. Otros investigadores declararon que no tenía nada que ver con uno conocido, y lo nombraron como NotPetya.
Sea como fuere, este ransomware tuvo su origen en Rusia y Ucrania y de ahí al mundo entero. Nuestro país fue uno de los afectados, llegando a la empresa naviera APM, de origen danesa, a tener que cerrar por motivos de seguriddad. El sistema de ataque fue exactamente el mismo que en el caso de WannaCry: pedir un rescate por la información secuestrada. En concreto, solicitaban a la víctima 300 dólares en Bitcoin.
Para no sufrir ninguna de estas amenazas, te damos a continuación unos cuantos consejos que podrán serte de gran ayuda. Solo debes seguirlos al pie de la letra y siempre tener el sentido común presente.
- Nunca, bajo ningún concepto, abras ningún archivo desconocido aunque te lo haya enviado alguien de confianza. Esa persona puede haber, a su vez, sido infectada y haberte remitido el virus sin tener conciencia de ello.
- Asegúrate de tener siempre las últimas actualizaciones de seguridad de Microsoft. Para ello, no dudes en entrar en los ajustes del PC, y luego, en Seguridad, mirar si tienes algún archivo de instalación pendiente.
- Instala un antivirus en tu ordenador o, simplemente, usa Windows Defender, instalado por defecto en las versiones de Windows 10. Es una herramienta efectiva para prevenir el ataque de estos tipos de virus.