La Samsung eBoard es un acercamiento diferente a la educación. Una pizarra electrónica con diagonal de 82 pulgadas que transforma la experiencia de enseñar en un aula. Esta pizarra combina funcionalidad táctil con la capacidad de utilizar un puntero para dibujar o tomar anotaciones. Además, podemos cargar en el panel vídeos o imágenes y moverlos con libertad a lo largo de toda la superficie, jugando con el tamaño según nos convenga. Todo ello a través del software Magic IWB 3.0, que también permite llevar a cabo otras funciones como mostrar con facilidad el contenido de los tablets de los estudiantes o conectarse con otra pizarra electrónica. Te contamos todos los detalles sobre esta útil herramienta para colegios y universidades.
Samsung es consciente del potencial que tiene la tecnología en los colegios y universidades. Nos encontramos en un momento de cambio y de adopción de nuevas herramientas para canalizar la enseñanza, y la compañía coreana se quiere situar en una posición aventajada de cara a los próximos años. El Samsung eBoard sube su tamaño hasta las 82 pulgadas y ofrece funcionalidad táctil, de modo que podremos mover los diferentes elementos de la pizarra por medio de los dedos o a través de un puntero. Esta segunda opción resulta más útil para poder llevar a cabo anotaciones o dibujos.
Esta pizarra electrónica funciona a través del software Magic IWB 3.0. En la demostración que Samsung llevo a cabo en la feria BETT de educación en Londres (a la que tuvimos el placer de asistir) pudimos ver cómo es posible cargar cualquier tipo de contenido multimedia en la pizarra, como por ejemplo vídeos e imágenes, y después moverlos a lo largo de toda la superficie e interactuar con ellos en cualquier momento. Estos elementos se combinan de forma que podemos estar tomando anotaciones en un lado de la pizarra al mismo tiempo que vemos un vídeo en otra esquina o tenemos abierta una imagen en la parte superior del dispositivo. Además, otra de las características que ha querido destacar la compañía es la opción de integrar una cámara web para poder abrir la imagen en tiempo real y que el profesor pueda estar atento a los movimientos de los alumnos sin necesidad de girarse a cada momento.
También podemos trabajar fácilmente con distintos grosores de bolígrafo o rotulador para realizar nuestros apuntes o dibujos en la eBoard, y borrarlos todos a través de un sólo toque o de una forma más tradicional a través de una herramienta de goma de borrar. Por cierto, otra de las claves de esta pizarra es su conexión con otros dispositivos que entren dentro de la dinámica de la clase, como por ejemplo la Samsung Galaxy Tab 4 Education. Una vez sincronizados, los estudiantes podrán cargar sus contenidos directamente en la pizarra electrónica, como por ejemplo la respuesta a un ejercicio o el documento con los deberes del día anterior. Sin duda, una herramienta que puede suponer un salto cualitativo en las tareas de enseñanza y que tiene como objetivo crear una experiencia de colaboración más interactiva entre los profesores y los alumnos.
