Mi experiencia con el Samsung TV QN900C Neo QLED tras un mes de uso

Samsung sigue mejorando su fórmula en televisores en este 2023. He podido probar durante una buena temporada el novísimo Samsung TV QN900C Neo QLED para degustar de primera mano qué es eso de Neo QLED y si las mejoras de este año se dejan notar en una experiencia que ya era realmente buena. Y la verdad es que hay tela que cortar. He probado el modelo de 65 pulgadas con su panel 8K HDR Pro, sus Quantum LED, sus tecnologías enfocadas al gaming como Motion Xcelerator Turbo Pro para moverlo todo a 144Hz, etc. Un televisor, eso sí, que llega al mercado con un precio de 5.800 euros. Y es que todos estos avances se pagan. Pero ¿interesa? ¿cumple con lo que dice? ¿hay evolución? Te lo cuento a lo largo de este análisis.

Ficha técnica	Samsung TV QN900C Neo QLED
Panel	Tamaño de pantalla 65″  Tasa de Refresco 100Hz (hasta 144Hz)  Resolución 7,680 x 4,320  Antirreflejos Sí
Vídeo	Motor de Imagen Procesador Neural 8K con IA  Mil millones de colores Sí  PQI 5000  HDR Neo Quantum HDR 8K+  AI Upscale Sí  HDR 10+ Certificado (HDR10+ Adaptive & HDR10+ GAMING)  Contraste Quantum Matrix Technology Pro  HLG Sí  Color 100% Volumen de color con Quantum dot  Ángulo de visualización Ultra Viewing Angle  Micro Dimming Ultimate 8K Dimming Pro  Contrast Enhancer Real Depth Enhancer  Modo cine Sí  Motion Technology Motion Xcelerator Turbo Pro  Reducción de ruido Sí  Expert Calibration Sí  Smart Calibration Básica/Profesional  Filmmaker Mode (FMM) Sí
Audio	Dolby Atmos Sí  Active Voice Amplifier Sí  Object Tracking Sound OTS Pro  Adaptive Sound Adaptive Sound Pro  Q-Symphony Sí  Audio Pre-selection Descriptor Sí  Salida de sonido (RMS) 90W  Tipo de altavoz 6.2.4CH  Woofer Sí  Multiroom Link Sí  Audio Bluetooth Sí  Dual Audio Support (Bluetooth) Sí  Buds Auto Switch Sí
Funciones inteligentes	Sistema operativo Tizen  Bixby Inglés de EE. UU., inglés del Reino Unido, inglés de la India, coreano, francés, alemán, italiano, español, portugués BR (las funciones varían según el idioma)»  Interacción por voz desde lejos Sí  Asistentes de Voz Alexa y Bixby  TV Plus Sí (GB, FR, DE, IT, ES, CH, AT, NL, SE, NO, DK, FI, PT, IE, BE, LU)  SmartThings Sí  Universal Guide Sí (GB, FR, DE, IT, ES)  Media Home Sí Mirroring de TV a Móvil Sí  Mirroring (DLNA) de Móvil a Televisor Sí  Video Comunicación: Google Meet  Multi-View hasta 4 videos  Sound Wall Sí  Mobile Camera Support Sí  App Casting Sí  Wi-Fi Direct Sí  Modo Ambiente Ambient Mode+  Wireless Dex Sí  Cloud Service Microsoft 365
Gaming	Auto Game Mode (ALLM) Sí  Game Motion Plus Sí  EQ Negros dinámicos Sí  Sonido envolvente Sí  Vista de juego de Super Ultra Anchura Sí  Mini Map Zoom Sí  Freesync FreeSync Premium Pro  HGiG Sí  Gaming Hub Sí
Conectividad	Sintonizador digital DVB-T2CS2 x 2  Sintonizador analógico Sí  Doble sintonizador Sí  CI (Interfaz común) CI+(1.4) / CI+(1.4 ECP)_IT only  HbbTV Sí  TV Key Support Sí HDMI 4  HDMI (High Frame Rate) 4K 144Hz (for HDMI 1/2/3/4)  USB 3  USB-C (solo cámara) 1  Entrada de red (LAN) Sí  Salida de Audio Digital (Óptica) 1  Entrada RF (Terrestre/Entrada cable/Entrada Satélite) 1/1(Common Use for Terrestrial)/1  CI Slot 1  HDMI A / Retorno al Canal Sí  eARC Sí(HDMI 3)  Conexión rápida HDMI Sí  Wi-Fi Integrado Sí (WiFi6E)  Bluetooth Sí(BT5.2)  Anynet+ (HDMI-CEC) Sí
Funciones extra	Ambient Mode Brightness/Color Sensor Detector Brillo/Color  Búsqueda Automática de Canales Sí  Subtítulos Sí  ConnectShare (HDD) Sí  ConnectShare (USB 2.0) Sí  EPG Sí  USB Grabador Sí (N/A for IT)  Idiomas Sistema Operativo 28 idiomas europeos + ruso  PIP Sí  Soporte USB HID Sí  Teletexto Sí  Cambio de hora Sí  One Connect Box One Connect (Y23 8K)  Compatible con IPv6 Sí  Compatible con mando universal Sí
Diseño	Diseño Infinity One  Tipo de marco Zero Bezel  Slim Ultra Slim  Color Frontal Titan Black  Tipo de peana Slim OC Stand  Stand Color Titan Black Dimensiones Caja (Ancho x Alto x Fondo) 1625 x 935 x 190 mm  Dimensión con Peana (mm) 1433.1 x 892.7 x 267.9 mm  Dimensión sin Peana (mm) 1433.1 x 819.9 x 15.2 mm  Tamaño de la peana (AnxProf) 360 x 267.9 mm  VESA Spec 400 x 300 mm Peso con Caja (kg) 43,3 kg  Peso con Peana (kg) 32,5 kg  Peso sin Peana (kg) 22,4 kg
Disponibilidad	Ya disponible
Precio	65″ por 5.800 euros

Montaje complejo pero diseño excelente

Por suerte, el usuario final que compre el Samsung TV QN900C Neo QLED en la web de Samsung recibirá el televisor y se le instalará de forma completamente gratis. En mi caso, he tenido que tirar de maña y ayuda para poder hacer el montaje. Que, por alguna razón, es algo más complejo que en otros televisores de la competencia.

En este caso el diseño del soporte es en forma de peana, dándole un toque más formal y minimalista, aunque para mi se acerca más a un monitor que un televisor clásicos. Pero el resultado supone poder instalar el televisor en cualquier mueble, sin necesitar grandes anchuras o tamaños alargados para que entren las patas en los modelos de mayores pulgadas. Eso sí, esta peana es súper pesada y el sistema te obliga a jugar con piezas que encajan de una determinada forma, atornillar varios tornillos y conseguir que todo encaje a la perfección. Mucho más complejo que otros televisores donde solo tienes que alinear los agujeros del pie para atornillar 4 u 8 tornillos sin tener la sensación de que estás montando un mueble de Ikea.

Salvo este detalle del montaje algo complicado, el resultado vuelve a ser espectacular una vez que el Samsung TV QN900C Neo QLED está sobre el mueble del salón. El panel no tiene marcos. Algo que resulta bastante sorprendente al no encontrar prácticamente un margen negro entre la imagen y el acabado metálico del borde que rodea el equipo. Todo es imagen y es la auténtica protagonista del televisor. Aun así, los detalles de ese acabado metálico troquelado le da un toque personal y distintivo respecto a otros televisores. Vaya, que Samsung ha conseguido dar personalidad a un televisor aunque apenas tenga detalles visibles más allá de la pantalla. Si la peana no es suficientemente llamativa con su acabado metálico, ese troquelado de los laterales te hará saber que es un televisor Samsung.

Por cierto, la peana vuelve a contar con un diseño especialmente pensado para acoger el One Connect o la caja que aglutina las conexiones de este televisor. Así, o lo colocamos como un reproductor de Blu-Ray en el mueble, o lo escondemos tras la pena del televisor. Todo bien pensado para conseguir un televisor con un grosor de 15,2 mm ocultando de la mejor manera todos los cables a través de esta caja de conexiones.

¡Ah! Y no me quiero olvidar del mando. Samsung sigue apostando fuerte por ser una marca eco-responsable. Y, aunque en el embalaje de este Samsung TV QN900C Neo QLED sigue habiendo algunos plásticos, su mando ha acabado desechando otras piezas contaminantes como las baterías. Ya no solo incluye una célula fotovoltaica para cargarse, sino que integra un condensador para evitar otros sistemas de almacenamiento de carga mucho menos respetuosos. También te digo que he tenido que conectar el mando unos minutos con mi cargador del móvil USB-C para que funcionase normalmente. Sigue siendo pequeñísimo, sin botones numéricos directos, pero con todo lo que necesitas para moverte por un Smart TV. Quizá incluir un segundo mando algo más “completo” para personas menos doctas en estos avances ayudaría enormemente. Pero la verdad es que la experiencia de uso con un mando tan pequeño se hace comodísima una vez que aprendes a manejarlo.

Neo QLED, marcando la diferencia en brillo y color

Poco a poco, la tecnología de los paneles de Samsung empieza a cubrir todo el mercado. Si los QLED de hace un par de años ya eran referencia en color, ahora Samsung explota también lo OLED para conseguir negros profundos. Y, en el punto intermedio, ahora está este Neo QLED. La clave está en los Mini LEDs que incorpora esta tecnología. Al ser focos de luz 1/40 del tamaño de los LED convencionales, es posible ampliar enormemente la red de iluminación, pasando del Full Array que ya todos conocemos, al Quantum Matrix Samsung de este Samsung TV QN900C Neo QLED. Como son más pequeños, con menos altura, la iluminación es mucho más precisa y controlada. Por eso recorta el espacio entre lo LED habitual y la tecnología OLED. Con ello consigue más niveles de negro y contraste, acercándose a las sensaciones OLED, pero también aumenta el brillo y el color. Por lo que la calidad de imagen es realmente buena incluso cuando tu salón está iluminado.

Y esto es algo que se nota bastante en las imágenes donde predominan los colores. Aquí las partículas cuánticas o Quantum Dots hacen el resto del trabajo para ofrecer esa sensación de colores bien saturados y brillantes. Sus diferentes tamaños filtran y reflejan la luz de forma mucho más nítida en cuanto a colorimetría, consiguiendo colores más puros. Por eso este panel no solo es capaz de representar más de mil millones de colores, sino que lo hace con el 100% del volumen del color en todos los casos. Da igual que sean tonos muy oscuros o muy claros, ese color se muestra definido y sin aberraciones cromáticas como líneas o manchas de color que hacen que la experiencia se arruine.

Durante estos días lo he podido comprobar especialmente con esos vídeos de YouTube que suelen centrarse en demostrar las capacidades de los paneles OLED. Gracias a ellos he comprobado el contraste más que correcto de este panel, que evita con sobresaliente problemas como blooming o imágenes que se desdibujan cuando se muestran sobre fondos negros. Y es que ahora hay cientos de zonas con entre 10.000 y 30.000 LEDs controlando qué se ilumina y qué no (local dimming). La sensación es de estar frente a un panel OLED. Algo que solo se podría desmentir con un verdadero OLED al lado. Gracias al control de la iluminación tan pormenorizado y detallado la sensación de calidad de imagen se dispara. Y la guerra entre OLED y Neo QLED deja de tener verdadero sentido. Uno potencia más el contraste, otro potencia más el brillo… Lo bueno de este Samsung TV QN900C Neo QLED es que se puede disfrutar con calidad incluso en salones con alta luminosidad. Vaya, que no he bajado las persianas y me he puesto en penumbra para percibir esa sensación de imagen sorprendente y bien saturada.

Además, la experiencia y el desarrollo propio de estos Neo QLED de Samsung, diferentes a otros Mini LED del resto de fabricantes, también tiene un impacto directo en el contraste o HDR. No solo el color se ve correctamente reflejado, las escalas de grises también se potencian con un contraste de 14 bit. Y es algo que sin ser experto en imagen quizá no notes. Pero sí se aprecia en películas de terror o cuando juegas con la consola a títulos de miedo o en niveles oscuros. Me he dado cuenta de que puedo ver todo tipo de detalles dentro de la oscuridad más absoluta. Reflejos, elementos que se ven al fondo de una sala prácticamente en penumbra, o incluso detalles en pelaje de animales que a simple vista son negros. Elementos que se aprecian más comparando con otros televisores, pero que están presentes en este Samsung TV QN900C Neo QLED.

Por cierto, aunque esto ya toca directamente el ámbito de los puristas del color, siendo algo casi subjetivo, Samsung cuenta con la certificación Pantone. Tanto para la representación de todos estos colores como para la representación de los tonos de piel. Algo bastante complejo en términos de colorimetría.

8K y el mejor reescalado de Samsung hasta la fecha

Que Samsung siga sumando presión hacia los contenidos 8K es toda una gesta. En contra, o no del todo a favor, está la industria que vería encarecer los precios de las cámaras que necesita para grabar y producir con esta calidad. Además, está el resto de la infraestructura que ha de gestionar un buen ancho de banda para mover todas estas imágenes con más detalle. Por no hablar del consumo eléctrico que supone gestionar imágenes 8K, y que ya se plantea limitar en Europa bajo normativa. Pero ahí está Samsung.

La clave es que han llegado los primeros y están mejorando su experiencia aún más. Y en este Samsung TV QN900C Neo QLED se nota muchísimo. No solo por la fiel y nítida representación de imágenes que se han grabado, editado y subido en 8K (en YouTube, porque pocas opciones más hay), sino por ver realmente bien el resto de imágenes que provienen de resoluciones mucho más inferiores. De verdad que estos días de prueba he quedado alucinado con la capacidad para reescalar imágenes de la TDT que llegan originalmente en HD. Obviamente no he visto los poros de la presentadora del telediario de turno. Pero tampoco se le ven las costuras a esta imagen cuando se reproduce en 8K, ni luce como cuando miras una obre de arte muy de cerca, con todas las pinceladas bien visibles. Y lo mismo, y aún mejor, ocurre con fuentes que sí alcanzan los 1.080 píxeles o FullHD. Y en 4K ya ni hablamos, porque la sensación es imperceptible a menos que hagas la comparativa directamente.

Según me ha contado uno de los responsables de producto de Samsung, en el procesador de este Samsung TV QN900C Neo QLED ahora hay aún más Inteligencia Artificial. Concretamente hay 64 redes neuronales estudiando cuadro a cuadro y detalle a detalle todas las imágenes que se van a proyectar en el panel. Y, de hecho, estas redes atienden individualmente a diferentes aspectos en vez de gestionar todo a la vez. Así, además de centrar en realzar la profundidad, mejorar los bordes y definición de las imágenes poco definidas o convertir con maestría el SDR en HDR sea cual sea la fuente, también siguen aprendiendo y mejorando sus capacidades. Vaya, que eso de televisor inteligente ha llegado a un punto donde realmente es visible y práctico, y no solo porque se conecte a Internet.

El resultado es que da igual lo que pongas en este televisor, porque todo se va a ver bien. La IA se encarga de mejorar la textura, el contraste, los contornos, el ruido, etc. Da igual si pones el canal de series antiguas en SD, si ves una película con tu suscripción básica de Netflix que no llega a 4K o si lo haces con una peli de Marvel a esta resolución en Disney+. El resultado es lo mejor que ha conseguido Samsung hasta la fecha en el ámbito del reescalado. Y es algo muy de agradecer en un panel que te muestra todo en 8K o un sucedáneo que da gusto ver.

Olvídate de la barra de sonido

Pero la experiencia de un televisor de gama alta no puede estar completa solo con la parte de imagen. Desde hace tiempo Samsung también trabaja en incorporar tecnologías y mejoras de sonido en sus pantallas, y el caso de este Samsung TV QN900C Neo QLED no iba a ser diferente. Nos encontramos con altavoces con 90W de potencia, ni más ni menos. Una potencia pensada para llenar estancias de gran tamaño sin problema. Sin necesidad de crear un complejo equipo de sonido que apoye a la imagen. Y sin necesidad de hacerte con una barra de sonido para tener potencia más que suficiente. Ni para crear sonido envolvente. Y es que, además de estos altavoces potentes llega con el códec Dolby Atmos, que es capaz de crear sensación de espacialidad en el salón y que te sientas en el centro de la acción.

Sin tirar más altavoces ni cables, he podido escuchar series de HBO Max con Dolby Atmos donde las pisadas, efectos de sonido y explosiones se sienten venir desde diferentes lugares del salón. Por supuesto, si eres purista del sonido y aún quieres más potencia o calidad, también integra Q-Symphony para sincronizar los altavoces del televisor con una barra de sonido o un equipo aún más completo. Y tampoco se han olvidado de OTS Pro, esa tecnología para crear la sensación de seguimiento de un sonido por todo el espacio. Samsung ha distribuido el sistema en altavoces superiores, centrales e inferiores para conseguir todas estas estas sensaciones en 6.2.4 canales. Y la experiencia es realmente rica incluso sin barra de sonido.

Y no me olvido de las posibilidades de vincular dos auriculares distintos mediante conexión Bluetooth, o de la presencia de un subwoofer. Así que lo dicho, el apartado de audio queda completo.

Una capa de personalización que ya no incluye publicidad

Otro punto muy importante que no podía dejar pasar en este análisis viene por la capa de personalización de Samsung en este televisor. El sistema operativo sigue siendo Tizen, pero hay un cambio radicalmente importante: ya no se bloquea la aplicación que quedaba anclada en la cabecera de la lista por mera publicidad. Todo es personalizable para poner, en el orden que queramos, nuestros servicios favoritos. Recuerdo en televisores de otros años que DAZN se quedaba en primer lugar de la lista, teniendo que pasar por encima de ella porque ni siquiera uso su servicio de streaming de deportes. Ahora, sin embargo, y por fin, una pulsación prolongada en el botón central del mando permite mover la aplicación de turno y colocarla en la posición de la lista que prefieras.

Aparte de esto, no hay grandes novedades respecto a opciones del año pasado. Se mantienen funciones útiles como el multiview, aunque sin poder escoger dos fuentes de antena para ver dos canales de TDT a la vez, por ejemplo (se soluciona al pinchar uno de los canales a través de Samsung TV Plus), se incorporan más contenidos a Samsung TV Plus, y se amplían los contenidos para el modo ambiental en el que usar el panel del salón como un gran cuadro donde ahora hay animaciones y no solo fotos o imágenes estáticas.

Conclusiones tras un mes de uso

¿Merece entonces la pena este Samsung TV QN900C Neo QLED? Indudablemente sí, siempre y cuando tengas un amplio presupuesto para tu televisor principal. No hay que olvidar su precio de 5.800 euros para el modelo de 65 pulgadas que he probado. Y es que la experiencia visual consigue alcanzar una nueva cota. Ya no solo porque la iluminación Mini LED de Samsung mejore notablemente lo visto en este segmento, sino porque es disfrutable en todos los aspectos. La calidad de imagen no solo luce espectacular por el detalle del color de los Quantum Dots y el brillo conseguido, también lo hace por el contraste y claridad, que no quedan limitados por un salón bien iluminado en este Neo QLED. Es, por tanto, un televisor más todoterreno.

También cumple con sobresaliente en el ámbito gaming, con la posibilidad de rebajar la resolución a 4K para disparar a 144Hz la tasa de refresco. Y el sonido es sobresaliente sin tener que añadir altavoces. Aunque es toda la inteligencia artificial que mejora la calidad de todas las fuentes lo que hace que este televisor se disfrute en cualquier situación y con cualquier contenido que le echen.

Así que sí. Samsung ha construido un televisor que mejora lo visto hasta ahora. Y que empieza a desdibujar detalles, tecnologías y cuestiones respecto a otros modelos como el OLED, aunque salvando las distancias y las tecnologías. Eso sí, de momento se limita a grandes presupuestos.