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Shein es sin duda una de las tiendas online más populares de los últimos años. Los precios reducidos, un catálogo amplio y atractivo y la gran amplitud de tallas disponibles hacen que se haya convertido en la tienda favorita de un gran número de personas. Pero como suele pasar no es oro todo lo que reluce. Y detrás de los precios tan económicos que podemos encontrar en la conocida tienda china hay algunos aspectos menos éticos. No se trata de sentirse culpables por comprar en Shein, pero sí es importante tener en cuenta algunos detalles.

Seguridad en entredicho

En principio, comprar en Shein es totalmente seguro. No deberíamos tener problemas con nuestros datos bancarios o similares, por lo que podemos comprar con tranquilidad. Pero en el caso de que en algún momento nos encontremos con problemas de seguridad, no tengas claro que te vas a encontrar. De hecho, la tienda online ha sido recientemente multada en Estados Unidos por no avisar del hackeo de los datos de millones de usuarios.

Este tipo de hackeos son muy poco habituales, por lo que no debemos tener miedo de que nos vayan a robar cuando compremos. Al fin y al cabo, hasta la tienda más segura puede tener problemas en un momento dado. Pero lo que pone en entredicho la ética de Shein no es que hayan intentado robar a sus usuarios a conciencia, sino la falta de transparencia a la hora de no comunicar que se ha producido ese problema. Avisar a los usuarios para que al menos se planteen cambiar la contraseña es lo mínimo que se debe hacer en este tipo de situaciones.

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Posibles condiciones de trabajo infrahumanas

Es muy complicado que los precios tan bajos que nos ofrece Shein se consigan pagando a los trabajadores un sueldo digno. Pero la realidad podría ser bastante más cruenta. O eso es lo que afirman investigaciones llevadas a cabo por la organización Public Eye en Suiza, recogiendo la información que consiguió al internarse en las fábricas de la marca. Según este grupo, las jornadas de trabajo en estas fábricas llegarían hasta las 75 horas semanales. Y, lo que es todavía más duro, con un solo día libre al mes, lo que supone estar trabajando más de 12 horas cada día.

Todo ello con un sueldo que no se corresponde con el tiempo de dedicación. La realidad es que este no es un problema exclusivo de Shein, e incluso muchas de las marcas que venden ropa a precios mucho más altos tienen detrás historias similares en lo que respecta a las condiciones de trabajo de sus empleados. Pero si eres de esas personas a las que le preocupa la ética que pueda haber detrás de una marca, es posible que la tienda online china no sea el mejor lugar en el que realizar tus compras.

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Sostenibilidad dudosa

Si te preocupa el cuidado del medio ambiente, es posible que te lo pienses dos veces a la hora de comprar en Shein. Y es que hay que tener en cuenta que los precios bajos se deben a que la ropa es de menor calidad y suele durar menos que otras prendas más caras. Pero cuando ya no nos sirve, se convierte en residuos. Por lo tanto, si compramos una gran cantidad de prendas de baja calidad y corta duración estaremos contribuyendo mucho más al deterioro del planeta que si compramos una sola prenda que resulte más cara pero nos dure más tiempo. Todo lo que sea compra compulsiva de muchas cosas nunca es lo mejor para el entorno.

Shein está intentando quitarse esa etiqueta de marca poco sostenible con Evolushein, su marca de ropa ecológica. Pero incluso esta opción sigue teniendo un problema, y es que el transporte de los pedidos desde la otra punta del mundo conlleva un proceso bastante contaminante.

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