Es un vídeo de tan solo catorce segundos, pero ha desatado en Twitter un auténtico hervidero de odio. Es el vídeo viral del hombre que en realidad no robó la bola de béisbol a un niño. Pero, empecemos por el principio. El fragmento que un usuario ha difundido a través de Twitter se corresponde con la grabación de un partido de béisbol de los Chicago Cubs.
En este se ve que un jugador lanza una bola de béisbol a la afición, sentada en la grada. Lo que parece en esta grabación es que la pelota va dirigida a un niño que estaba sentado junto a su madre. Pero que al final, es el hombre que está sentado justo detrás el que consigue coger la pelota para entregársela después a su mujer.
La cara del niño parece que lo dice todo. Porque en su rostro tiene una sonrisa un tanto rara. Una mueca entre satisfacción y decepción. Con este panorama, las redes no han tardado en incendiarse. Los usuarios de Twitter han convertido a este hombre en un villano de los de libro. Sin embargo, lo que ocurrió en la grada del campo poco tiene que ver con lo sucedido en la realidad.
When going to a baseball game, DON'T be this guy. pic.twitter.com/pAeiRN6Q2X
— Cut4 (@Cut4) July 22, 2018
¿Qué pasó en realidad con el hombre que no robó la bola de béisbol a un niño?
Todo tiene que ver con la manera en que miramos el mundo. O con la manera con que dejamos que otros nos lo enseñen. La historia sucedió tal que así. Un aficionado que en ese momento estaba en la grada junto a ese hombre (el que en teoría había robado la pelota al niño) recibió un mensaje de su hijo, que le preguntaba si había estado sentado al lado de ese indeseable sujeto. En ese momento las redes ya se habían incendiado.
Fue entonces cuando se reveló la verdadera historia que había detrás de ese hecho. Parece ser que esa no era la primera pelota que caía en la grada. Lo que no se ve en ese vídeo es que ese hombre ya había entregado antes una bola de béisbol a ese pequeño y que después, se quedó con una que entregó a su mujer en un día muy especial para ellos: el de su aniversario de boda.
Luego consiguió cazar al vuelo otras pelotas que repartió entre los niños que estaban sentados en la grada y que, como el otro protagonista de esta historia, también se encontraban disfrutando del partido.
Parece, además, que al final del partido, los Chicago Cubs dieron una pelota firmada a ese niño, que se fue a casa con dos: una firmada y otra sin firmar, que era la que dos entradas antes le había entregado el coronado por los tuiteros como villano nacional.
A @javy23baez signed ball should take care of it. #EverybodyIn pic.twitter.com/4YzUlG8qfN
— Chicago Cubs (@Cubs) July 22, 2018
La madre del niño aclaró la polémica
Tanto el speaker de los Chicago Cubs, David Kaplan, como la madre del niño han tenido que aclarar que en efecto, lo de ese señor no fue un robo, sino todo lo contrario. Cuentan que en sea jornada se lanzaron muchas bolas y que muchos de los fans que estaban en las gradas pudieron llevarse la suya a casa.
Con todo, parece que la polémica ha quedado zanjada. Y aunque muchos deberían pedirle perdón al pobre hombre que celebraba el aniversario con su mujer, parece que todo quedará falsamente cerrado. No hay quien escape de las garras de los tuiteros. Mucho cuidado con ellos: te puede tocar a ti.