Lo último que esperamos cuando nos ponemos un móvil en la oreja para efectuar una llamada es que nos explote. Si bien es cierto que en los últimos años se han dado algunos casos aislados, el que hoy tenemos que tratar ha terminado mal. Muy mal.
Una adolescente ha muerto en la India por la explosión de un móvil Nokia antiguo. Uma Omram, residente en Kheriakani, en el distrito de Odisha, falleció en el acto cuando usaba el dispositivo el pasado viernes. Todo fue a causa de la explosión de su Nokia 5233, un móvil que ya podemos considerar antiguo, pero que todavía está presente en muchos países emergentes como herramienta de comunicación básica.
Uma estaba hablando por teléfono con un pariente cuando el móvil explotó. Parece ser que este Nokia 5233 estaba conectado a la red eléctrica mientras estaba hablando.Su hermano la encontró tirada en el suelo, con quemaduras por el cuerpo. Y con un teléfono Nokia conectado. Las consecuencias del incidente fueron ciertamente nefastas.
Una explosión mortal
La explosión provocó graves heridas en Uma, incluyendo heridas en la mano, en el pecho y en la pierna. El impacto, además, la dejó inconsciente. Tras percatarse de lo sucedido, la joven fue trasladada a un hospital, donde los médicos ya no pudieron hacer nada por salvar su vida.
Estos aseguran que las quemaduras no eran lo suficientemente graves como para causar su muerte. Pero apuntan a la posibilidad de que Uma se hubiera electrocutado. En cualquier caso, este extremo lo determinará la autopsia.
El caso es que la compañía HMD Global, que es la actualmente desarrolla y vende equipos Nokia, se ha desentendido del incidente. Ellos dicen que el Nokia 5233 no fue fabricado por ellos. Y de hecho es así. La responsabilidad, en ese caso, sería de la antigua Nokia.
El Nokia 5233, de hecho, fue presentado hace justo ocho años. Era un móvil equipado con una conexión 3G y con una pantalla táctil resistiva. Y si bien en España ya es prácticamente imposible conseguir este dispositivo (tendríamos que buscar y rebuscar en algún mercadillo de segunda mano), en la India es un teléfono que se vende en Amazon por unas 3.000 rupias, que son prácticamente 40 euros al cambio actual.
