En las últimas horas hemos sabido que existe un virus que puede llegar a destruir físicamente tu móvil. Todas las semanas nos topamos con noticias que nos alertan sobre la existencia de nuevos virus y amenazas. Y que muchos de estos, además, están especialmente dirigidos contra los usuarios de Android. Ellos son, de hecho, una aplastante mayoría en la mayoría de mercados. En España, por ejemplo, los móviles con Android ocupan más del 80% de la cuota de mercado.
Sin embargo, el virus que acaba de darse a conocer tendría un modus operandi un tanto siniestro. Tanto que incluso podría llegar a causar daños físicos en nuestros teléfonos.
Puede que ya hayas escuchado su nombre. Se llama Loapi y es un virus o malware dirigido a equipos con Android. La encargada de dar con esta amenaza ha sido Kaspersky Lab. Alerta de que el virus es tan potente que incluso puede llegar a destrozar tu teléfono.
Los iconos bajo los que puede estar escondido Loapi
Loapi, el virus que puede destruir físicamente tu móvil
Hasta ahora, cuando hablábamos de amenazas o virus los vinculábamos a destrozos a nivel de software. Pero nunca de carácter físico. Loapi, el virus que puede destruir físicamente tu móvil tiene un comportamiento bastante raro. Porque está compuesto por distintos módulos maliciosos.
Esto da a este virus la potestad de ejecutar muchas acciones. Si un dispositivo queda comprometido por esta amenaza, las opciones para los atacantes son absolutamente variadas. Se pueden llevar a cabo acciones de minería de criptomonedas. E incluso ataques DDoS.
Pero la particularidad más relevante de este virus tiene que ver con el hecho de que pueda llegar a causar daños físicos en el teléfono. Según se ha demostrado tras las investigaciones, el malware fuerza el dispositivo con cargas de trabajo tan altas, que la batería puede alcanzar temperaturas elevadísimas. Y hacer que la pieza se deforme.
Los expertos consideran que este no era el propósito real de los atacantes. En realidad, lo que ellos probablemente querían era recaptar la mayor cantidad de dinero posible. Pero esta especie de fallo en el malware puede provocar serios problemas y daños físicos importantes en los dispositivos atacados.
¿Cómo llega Loapi a los dispositivos?
El despliegue de Loapi se realiza a través de medios tradicionales. Según los investigadores, está llegando a través de campañas de publicidad y se muestra como si fuera una solución de antivirus. También puede tener forma de aplicación para adultos. La aplicación se instala en los equipos y solicita permiso al usuario para tener derechos de administración sobre el dispositivo.
A partir de ahí, empieza la fiesta. El malware se conecta con los servidores de comando y control para empezar a instalar nuevos módulos en el teléfono. Como te hemos indicdo, Loapi es un virus muy completo, que contiene los siguientes módulos: Adware, para insertar publicidad en el equipo; SMS, para llevar a cabo operaciones mediante mensajes de texto; Rastreador Web, para inscribir a los usuarios en servicios de pago sin su autorización (llegando incluso a responder los SMS sin que el usuario lo sepa y eliminando su rastro para no levantar sospechas); Proxy, para llevar a cabo los denominados ataques DDoS y Minero de Divisas, para minar Monero, que es la moneda criptográfica.
Loapi puede autoprotegerse
Este virus tiene otra particularidad, que es la capacidad de autoprotegerse. Por ejemplo, existe un listado de aplicaciones no seguras (son antivirus, claro) que no admite. Lo que hace es emitir un mensaje falso en el que se indica que ha encontrado software malicioso y dirige al usuario a eliminar la aplicación. Esta advertencia se muestra en bucle, hasta que el usuario acepta esta posibilidad.
Además, cuando el usuario se da cuenta de la amenaza e intenta revocar los derechos otorgados a Loapi como administrador, el virus se encarga de bloquear la pantalla del teléfono.
Para estar totalmente protegido ante este tipo de amenazas, es recomendable mantener el dispositivo siempre actualizado con la última versión de software que exista. Desactivar la posibilidad de instalar aplicaciones que no procedan de sitios oficiales y lógicamente, instalar una solución de seguridad completa para el móvil.
