Las fotos de la Capilla Sixtina mostradas a tamaño real en la presentación del proyecto, en El Vaticano. REUTERS/Philip Pullella
Si has estado alguna vez en la Capilla Sixtina sabrás que estar físicamente allí es un verdadero espectáculo visual. Una delicia para los amantes del arte. La Meca de los amantes de la pintura renacentista. No en vano, la bóveda de la Capilla aloja una de las mayores y más completas obras de arte de la historia, realizada por Miguel Angel entre 1508 y 1512.
Hoy los frescos del autor renacentista regresan a la actualidad (si es que en alguna ocasión habían estado fuera de ella) porque acaban de pasar a formar parte de una versión digital en una calidad sin precedentes. Aunque el completo conjunto pictórico ya había sido fotografiado en una ocasión, nunca antes se había conseguido capturar en imágenes con la tecnología que ahora tenemos a nuestro alcance.
No en vano, las capturas que ya se hicieron en su momento de la Capilla Sixtina fueron realizadas entre 1980 y 1994, de modo que a estas alturas – y con las tecnologías existentes hoy – habrían quedado ya obsoletas.
Han hecho falta, eso sí, cinco años de trabajo intenso para recoger la friolera de 270.000 fotogramas digitales. No ha sido nada fácil, porque los fotógrafos que han trabajado en el proyecto han tenido que hacerlo encima de un andamio de 10 metros durante 65 noches, en las que trabajaban a puerta cerrada desde las 19:00 a las 2:00 de la madrugada.
El dedo de Dios, a tamaño real REUTERS/Philip Pullella
30 terabytes de información
Usaban lentes telescópicas especiales con las que se han obtenido imágenes, ahora almacenadas en un servidor del vaticano, que ocupan hasta 30 terabytes de información. Luego se han reproducido en más de 220 páginas a tamaño real, conformadas por tres libros, en los que también se incluyen los mosaicos del suelo. Estos también han sido fotografiados aprovechando la presencia de los fotógrafos y la magnitud del proyecto.
Así, en estas páginas podrán verse con toda claridad escenas tan relevantes como «La creación de Adán» o el rostro de Jesús en el «Juicio Final». El conjunto está compuesto por tres volúmenes de 870 páginas cada uno. Y aunque se trata de un volumen muy costoso, se ha querido ofrecer una edición limitada de 1.999 copias dirigidas a bibliotecas y coleccionistas. El precio de este trabajo de impresión y edición se ha elevado a 12.000 euros.
Ahora bien, los volúmenes no caben en una estantería cualquiera. Cada uno de ellos pesa casi 9 kilos y mide 60 x 130 centímetros. La edición ha corrido a cargo de los Museos Vaticanos y la editorial Scripta Maneant.
Pero ojo, que no estamos únicamente ante un capricho editorial. La principal razón por la que se ha fotografiado la Capilla Sixtina centímetro a centímetro tiene que ver con las restauraciones que tendrán que hacerse en un futuro. Gracias a la captura al detalle de estas imágenes, las restauraciones a realizar podrán ser mucho más acertadas y absolutamente fieles a lo que son estos frescos en 2017.
La Capilla Sixtina, la obra de arte completa
Ha sido considerada desde siempre una de las obras de arte más completas que existen. La boveda de la Capilla Sixtina reúne un importante conjunto de pinturas al fresco realizadas por Miguel Angel entre 1508 y 1512, por encargo del papa Julio II. El objetivo era el de sustituir la obra que en ese momento decoraba la capilla, un fondo azul con estrellas doradas, que había pintado Piero Matteo d’Amelia
La bóveda incluye una compleja arquitectura en la que Miguel Angel narró las historias del Génesis. Lo hizo sin la ayuda de nadie – he aquí una de las grandes proezas del artista – incluyendo las siguientes escenas: La embriaguez de Noé, El diluvio universal, El sacrificio de Noé, Caída del hombre, pecado original y expulsión del Paraíso, La creación de Eva, La creación de Adán (una de las más célebres del conjunto), Separación de las aguas y la tierra, Creación de los astros y las plantas y Separación de la luz de la oscuridad.
