Estamos acostumbrados a que los políticos y los empresarios importantes dediquen reuniones y sesiones a fijar la vista en la pantalla del móvil y avanzar un poco en los juegos de moda. Además, tampoco es raro que un político se aburra en su propio trabajo y no se tome en serio la importancia de lo que debería tener toda su atención…
Después de la fiebre de Candy Crush, el juego que ha llegado para entretener a los políticos en sus horas de trabajo parece ser Pokémon GO. Y esta vez, la pillada no ha sido en España, sino en uno de los países nórdicos de Europa: se ha podido ver a una política noruega capturando Pokémon en una sesión de reunión del Parlamento de su país.
El detalle que más escándalo e indignación ha causado en Noruega es que no se trata de una política cualquiera, sino de la primera ministra del país, Erna Solberg. La pillaron jugando a Pokémon GO durante una sesión de debate en el Storting, el Parlamento de su país.
Pillada jugando a Pokémon GO en el Parlamento
Erna Solberg, la primera ministra noruega, ya es conocida popularmente por su entusiasmo con el juego Pokémon GO. De hecho, no tuvo problema en confesar que, con ocasión de un reciente viaje oficial a Eslovaquia, había sacado tiempo libre para jugar y caminar hasta hacer eclosionar algunos de los huevos de 10 km que tenía en Pokémon GO.
Esta vez, sin embargo, la situación parece haberse ido de las manos. Las reacciones de indignación (y de cachondeo) de los usuarios de Twitter no se han hecho esperar desde que Tom Henning Bratlie hizo pública esta foto de la sesión de juego durante un debate en el Parlamento noruego.
Así se defendió oficialmente
Dado el revuelo que ha causado la fotografía, y teniendo en cuenta las reacciones de los ciudadanos en las redes sociales, la primera ministra noruega se ha visto obligada a hacer una declaración pública al respecto, aunque su argumento no ha sido muy bienvenido: Erna Solberg le ha quitado hierro al asunto afirmando que «había escuchado todo lo que se decía en el debate», porque «ya se sabe que las mujeres pueden hacer varias cosas a la vez».
¿Justicia poética o una especie de venganza sutil?
Tras esta «pillada legendaria», hay quien se pregunta si la primera ministra empezó a jugar simplemente por aburrimiento o si hay un motivo un poco más rebuscado o una intención precisa en su acción, un juego a nivel político contra la oposición.
El pasado mes de agosto, la líder del partido de la oposición también fue sorprendido jugando a Pokémon GO en un evento oficial de seguridad nacional. Esta política, Trine Skei Grande, era precisamente quien estaba hablando en el Parlamento cuando la primera ministra decidió jugar a Pokémon GO.
Aunque podría ser pura coincidencia, también cabe la posibilidad de que Erna Solberg utilizara el gesto como una especie de venganza simbólica… aunque no le haya salido del todo bien. Eso sí, en declaraciones a la televisión noruega lo añadió como comentario: «Que conste abrí el juego cuando empezó a hablar Skei Grande».
Que penzaba en ese momento Erna Solberg:
-«En el parlamento solo se encuentran ratas»