Cada vez están más cerca de extenderse a lo largo y ancho de Estados Unidos. Hablamos de los coches autónomos, cuya seguridad y prestaciones en la carretera han encandilado a la Administración Obama, hasta tal punto que ha impulsado un plan de desarrollo de esta innovadora forma de transporte al creerla más segura y eficiente.
Esta moderna forma de transporte ya era común en las cercanías del campus de Google, en la zona de Mountain View. También para la compañía Ubber, que desde la semana pasada han comenzado las pruebas para su uso en las calles de Pittsburgh, en el Estado de Pensilvania. Y de ahora en adelante, se empezarán a ver por todas las carreteras del país americano, ya que el propio Presidente Obama se ha fijado como objetivo extender este modelo de transporte. La razón radica en que cada año se producen miles de víctimas en las carreteras, de las cuales un altísimo porcentaje se deben a un fallo humano.
“Ahora mismo muchísima gente muere en nuestras carreteras. Solo el año pasado fueron 35.200 las víctimas. De los mismas, el 94% lo hicieron a causa de un error humano o una mala decisión. Los vehículos autónomos tienen el potencial para salvar decenas de miles de vidas cada año”, admite Obama en un artículo publicado en el Pittsburgh Post-Gazette y recogido por El País.
Anthony Foxx, Secretario de Transporte estadounidense, fue el encargado de presentar los atractivos de un plan que se compone de 15 puntos, los cuales se darán a conocer este martes y detallarán cómo deberán reaccionar estos vehículos en caso de fallo tecnológico, mostrarán formulas para garantizar la privacidad de los pasajeros y promoverán técnicas de seguridad pasiva para actuar en caso de colisión.
El sector avanza a paso ligero
Las principales empresas tecnológicas y los gigantes del automóvil se empiezan a mover a gran velocidad ante lo que se les viene encima. En el caso de Google comenzaron con Nexus antes de desarrollar su propio vehículo, Ubber se ha aliado con Volvo y de Tesla ya hemos hablado otras veces tras convertirse en pionera al poner al alcance de sus clientes un autopiloto, un modelo que no es independiente del todo, ya que aunque el coche se conduce solo es necesario tener las manos en el volante.
Durante un tiempo corrió también el rumor de que Apple estaría pensando dar el salto a este mercado, sobre todo tras contratar ingenieros de Tesla, Mercedes, BMW y Toyota, aunque en el último mes se han producido varios despidos que podrían dar al traste con este planteamiento. Por último, Ford, la mítica empresa centenaria, también ha admitido tenerlo en mente, aunque en principio hasta 2021 no tendía listo el nuevo modelo. Para llegar a tiempo, la compañía, en su sede de Palo Alto, ha triplicado el personal para no perder ni un segundo.