peores selfies de la historia

Que los selfies o autofotos son más que una moda pasajera ha quedado patente en la industria de los móviles. Así­, cada vez se crean terminales con mejores cámaras en la parte frontal, ofreciendo no sólo más calidad, sino más filtros, máscaras virtuales y toda clase de aplicaciones para sacar el máximo provecho a nuestros rostros o para ubicarnos en una situación o momento dados. Ahora bien, ¿hay lí­mites a la hora de tomar este tipo de fotos? ¿Convendrí­a pensar en la moralidad y ética de la situación o momento que se va a retratar antes de presionar el botón? Desde luego, los integrantes de este artí­culo no lo tuvieron muy en cuenta. Recuerda: no hagas esto en casa, por tu bienestar social, profesional y, en algunos casos, por el fí­sico”¦

peores selfies de la historia

No querí­amos comenzar este recopilatorio de selfies de forma tan rotunda. Pero es que son los peores selfies de la historia”¦ es lo que hay. No podemos comentar gran cosa acerca de esta instantánea. Quizá la foto que tomó la chica era sensual y excitante. Visto desde fuera, la situación es de lo más ridí­cula. De nuevo, evitad haced esto, sobre todo en público.

peores selfies de la historia

Alguien ha aprendido la lección tras esta foto, y no ha sido precisamente el camello. Cuidadito con dar la espalda a los animales, los carga el diablo.

peores selfies de la historia

Este chico de fuertes y torneados brazos olvidó dos de los pilares básicos de la fotografí­a: escoger un buen encuadre y evitar sacar a tus amigos defecando. No pasamos a comentar la iluminación ni la técnica porque preferimos imaginarnos qué se le estará pasando por la cabeza a aquel que está sentado en el trono.

peores selfies de la historia

¿#Necropostureo? ¿#Imbecilidad? ¿Falta de respeto? Desde luego se ha ganado un hueco en nuestra lista de los peores selfies de la historia. Si un servidor tuviera poderes divinos harí­a que la abuela se levantase y le diera una colleja. No, los velatorios no son lugares para selfies. Repite conmigo: los velatorios no son lugares para selfies”¦

peores selfies de la historia

Premio a la madre del año.

peores selfies de la historia

Si pretendí­as parecer sexy tenemos que decir que has fallado estrepitosamente. No volveremos a mirar al sirope de chocolate de la misma manera. No te lo perdonaré jamás, individuo del selfie, jamás.

https://youtu.be/iS7viNgmAdU

Volvemos a los animales, y nos ponemos serios para hablar de ellos. ¡Son peligrosos! Primero porque te hacen photobomb (interponerse en tu autofoto), y segundo porque parecen dispuestos a atacar al humano en el momento que menos lo esperan. Prueba de ello es este gorila, o la noticia real de que cada vez hay más ataques de bisontes en el parque natural estadounidense de Yellowstone por despiste de los usuarios, que se centran en sacarse fotografí­as. De verdad de la buena.

peores selfies de la historia

La cara del gato lo dice todo.

peores selfies de la historia

Estás divino. No se nota nada el Photoshop de la foto. Ahora bien, tu persiana tiene una forma un poco rara”¦

peores selfies de la historia

El amor es libre”¦ y la imaginación también. No sabemos el tipo de relación que tienen las dos personas de la foto, pero sabemos que vuestro cerebro va a sufrir un cortocircuito al ver las dos imágenes juntas. Sí­, así­ es el listado de las peores autofotos de la historia, queridos lectores.

https://youtu.be/G4Ck5BnJBeY

Cerramos con un clásico. Un buen ejemplo de lo peligrosos que son los selfies y lo atrevida que es la estupidez humana.

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