Una de las noticias del 2014 fue, sin duda, el robo de fotos de famosas desnudas en iCloud, que destapó el escándalo en Hollywood y puso en jaque la seguridad del servicio de alojamiento en la nube de Apple. Un año y medio después arranca el juicio contra el presunto responsable de lo ocurrido, Ryan Collins, de 36 años de edad y original de Pensilvania. Collins ha sido acusado de un delito grave de piratería informática relacionado con el incidente Celebgate, por el que se pasó dos años consecutivos realizando estafas de phishing para obtener los nombres de usuario y contraseñas de cuentas de iCloud y Gmail.
Entre algunas de las grandes personalidades afectadas por el escándalo se encuentran Kirsten Dunst, Jennifer Lawrence, Hayden Panettiere, la estrella de la televisión Kaley Cuoco, conocida por The Big Bang Theory, o la explosiva y controvertida Kim Kardashian. Todas ellas con imágenes muy personales, que alojaban en el servicio iCloud sin saber que la seguridad es primordial cuando uno maneja fotos de este calibre en un dispositivo. En concreto, el hacker consiguió fotos de desnudos y vídeos subidos de tono de más de cien celebridades del cine y de la televisión, que llegaron a 4Chan (un popular foro para compartir imágenes y archivos) justo después de que se difundiera la primera tanda de imágenes.
Ahora, el presunto responsable de lo ocurrido, Ryan Collins, podría enfrentarse a una pena máxima de prisión de cinco años, aunque su condena podría reducirse a 18 meses después de llegar a un acuerdo con la fiscalía. Eso sí, Collins está siendo acusado por irrumpir en las cuentas personales de las celebs y no por las fugas que se realizaron a los sitios Reddit o 4chan. El FBI también habría registrado los domicilios de dos hombres en Chicago relacionados con este tema, lo que quiere decir que muy pronto también podrían salir a la luz nuevos acusados.
Como os informamos en su momento, el incidente Celebgate se realizó mediante phishing, un tipo de técnica que simula ser una entidad en especial y formula una petición real para restaurar la contraseña. Los afectados al recibir la petición introducen su nombre de usuario y su clave, que pasa automáticamente a manos del hacker. En un primer momento se señaló a Apple como la verdadera culpable, ya que las imágenes estaban alojadas en iCloud, su servicio de almacenamiento en la nube. Posteriormente se reveló que fueron las propias víctimas quienes habían dado sus credenciales a Collins sin que ellas lo supieran.
En su momento, Apple hizo algunos cambios de seguridad en el servicio y el máximo dirigente de la compañía, Tim Cook, realizó unas declaraciones. Cook aseguró que lo fundamental para garantizar la seguridad del contenido almacenado en la nube no es el factor tecnológico, si no utilizar contraseñas difíciles de adivinar y también hacer uso del sistema de doble verificación. El directivo defendió en su momento que el fallo no se encontraba en la protección de los dispositivos, si no en las claves que tenían las famosas en iCloud, que eran sencillas de adivinar. Finalmente el tiempo le dio la razón, no eran los culpables, y ahora Collins espera a ser juzgado por lo ocurrido.
Actualización: En las últimas horas ha habido noticias sobre este caso. Ryan Collins finalmente se ha declarado culpable en Los íngeles por hackeo cibernético y por acceder sin autorización a un ordenador protegido para obtener información. El acusado podría pasar hasta cinco años en prisión.