Samsung habría registrado una patente en Corea del Sur sobre un método que ayudaría a los smartphones a entender mejor el habla en voz baja. No se conoce exactamente la tecnología que se emplearía para llevar esto a cabo, tampoco el sistema, pero lo que parece evidente es que la asiática quiere que sus próximos teléfonos suenen mucho mejor cuando el interlocutor esté susurrando.
Básicamente, el teléfono sería capaz de distinguir el momento en el que hubiera una drástica disminución en el volumen una vez que el usuario hiciera un gesto al lado de la pantalla indicando que ha tenido que bajar el tono del habla. Tal y como se puede apreciar en la imagen superior, el smartphone perfeccionaría el sonido en el momento en el que nuestro interlocutor realizara el típico movimiento para expresar que está hablando bajo para que nadie se entere. Lógicamente esto podría ser muy útil para cuando se tengan que comentar asuntos discretos que no queremos que otras personas de nuestro alrededor escuchen.
La presentación de esta patente se hizo en KIPRIS (Oficina Coreana de la Propiedad Intelectual) el 16 de julio de 2014, y el título exacto es «Método y aparato para reconocer el susurro de la voz.» No sabemos si esta tecnología patentada llegará en forma de aplicación para descargar únicamente en teléfonos Samsung, o bien directamente estará pre-instalada en el propio dispositivo. Sea lo que sea, pensamos que no hará su debut en el próximo Samsung Galaxy S7, el nuevo buque insignia de la compañía que podría ser presentado en Barcelona durante el Mobile World Congress.
Hubiera sido una muy buena característica para el nuevo smartphone, pero de momento tendremos que conformarnos con el resto de prestaciones que en estos momentos se rumorean. Por lo que conocemos hasta el momento, el Galaxy S7 contaría con una pantalla de 5,1 pulgadas y resolución QHD (2.560 x 1.440 píxeles). Este tamaño subiría considerablemente en las versiones con pantalla curva (Samsung Galaxy S7 Edge y Samsung Galaxy S7 Edge Plus). En su interior habría cabida para el nuevo procesador de Qualcomm, Snapdragon 820, que podría estar acompañado por una memoria RAM de 4GB, aunque no se descarta que la surcoreana sorprendiera y finalmente añadiera una de 6GB.
Por su parte, según los últimos rumores, la cámara bajaría su resolución con respecto al modelo del año pasado. De este modo, nos encontraríamos con una cámara principal con sensor de 12 megapíxeles, que incluiría píxeles de mayor tamaño para captar mejor la luz y así sacar imágenes de mucha más calidad y definición. En cuanto a la versión del sistema operativo con la que aterrizaría en el mercado, se dice que sería Android 6.0 Marshmallow, la última presentada por Google hace ahora algunos meses. Como decimos, es muy probable que este dispositivo y sus variantes se dejen ver el próximo 21 de febrero en el evento Unpacked que se celebraría horas antes de que el MWC abriera sus puertas un año más.