Es frecuente, con cada vez más asiduidad, ver teléfonos Android de gama media con cámaras de alta resolución. Los fabricantes están centrándose mucho en este apartado, ya que los usuarios reclaman realizar buenas fotos y selfies directamente desde su móvil, sin tener que llevar a cuestas también la cámara digital. A pesar de que cuando capturamos imágenes solemos echar mano del modo automático, hay diversas funciones que nos van a permitir mejorar la calidad final de la imagen. Porque, por si no lo sabes, quizá tu teléfono Android cuente con estabilizador de imagen óptico, filtros, flash de doble LED…¿Quieres saber entonces cómo hacer las mejores fotos? Sigue leyendo.
Lo primero que tienes que tener en cuenta es algo que parece muy obvio, pero que la gran mayoría de los mortales nunca hacemos: limpiar bien la lente. Hazlo siempre antes de capturar alguna fotografía. Casi todos los teléfonos móviles actuales cuentan con enfoque automático. Los de alta gama, incluso, disponen de un modo inteligente que tiene en cuenta el motivo central de la imagen. Lo cierto, es que el sistema no siempre funciona de manera automática. De este modo, lo mejor es que se active el enfoque manual y, a la hora de tomar una fotografía, se seleccione el punto de enfoque de manera independiente. Es tan fácil como dar golpes en la pantalla con el dedo en la zona que queramos enfocar.
Intenta evitar el zoom. El zoom en un smartphone no es como el de las cámaras réflex (que es óptico). En su caso es digital, y esto provoca que lo único que consigamos al usarlo sea agrandar los pocos píxeles que ocupa el paisaje que se encuentra alejado. Básicamente el resultado es una imagen borrosa y con un definición nada profesional. Si el objeto que quieres capturar está algo lejos, lo mejor es que te acerques físicamente para conseguir una foto en condiciones.
Otra de las recomendaciones que te hacemos para conseguir capturar una buena foto con un móvil Android, es usar una regla que proviene de la pintura y que ha sido usada por grandes artistas. Se basa en dividir la imagen en cuatro líneas imaginarias (de forma vertical y horizontal) y a su vez en nueve cuadrados. Aquellos objetos prioritarios han de posicionarse en el interior de las lineas, lo que asegurará una imagen armoniosa. Ya hay móviles con cámaras que cuentan con esta característica, pudiendo ver este campo imaginario directamente desde el visor.
Aunque no lo creas, lo mejor a la hora de hacer la fotografía es elegir lugares con sombra en lugar de sol. El ojo humano suele percibir las diferencias de brillo, pero los móviles no, algo que suele acabar fastidiando la foto. Por ello, lo mejor es que huyas del sol o esperes a que haya un día nublado para sacar tus dotes de fotógrafo. Por otro lado, usa el flash en ocasiones puntuales. Sí en casos en los que no haya nada de luz, pero es preferible conseguir una imagen con algo de ruido (con luz natural aunque sea escasa), que recurrir a la luz artificial que aporta el flash.
