¿Te acuerdas de Antonio? ¿Del bar? ¿Y de la llorera que echaste al ver el anuncio de la Lotería de Navidad del año pasado? Pues prepárate desde ya para ir abriendo el pañuelo. Leo Burnett, la misma agencia que se encargó de poner en marcha la maquinaria del Bar de Antonio, acaba de dar a conocer el anuncio de la Lotería de Navidad 2015. Si ya le has dado al play, habrás visto que se trata de un corto de animación – vale, vete secando las lágrimas, ya está bien – en el que Justino, un vigilante de seguridad de turno de noche en una fábrica de maniquíes trata de hacer la vida más alegre a sus compañeros. Les prepara todo tipo de sorpresas, a cuál más entrañable y navideña, pero se le olvida una cosa: comprar un décimo de la empresa que, curiosamente, acaba siendo el primer premio del sorteo de Navidad. El desenlace promete, pero no queremos desvelarte cómo termina la historia de Justino, no vaya a ser que todavía no te hayas animado a ver el anuncio…
Pues bien, como te decíamos, estamos ante un concepto de lo más original. El equipo de Leo Burnett ha empleado la técnica de la animación para contar una historia emocionante y entrañable, perfectamente ajustada a esta Navidad tan nuestra… esa misma que empieza con el sorteo del 22 de diciembre. La agencia ha confeccionado un buen personaje: alguien que trabaja, que está solo… un vigilante de seguridad, pero a la vez, una persona de esas extrañas y singulares que disfrutan haciendo felices a los demás. ¿Y qué hay sobre la tecnología? Pues para la ocasión se ha trabajado en un proceso de animación que consiste en pasar los dibujos de dos dimensiones a tres dimensiones. Y el resultado es francamente mágico. Se trató, cuentan sus creadores, de un arduo trabajo que evolucionó de ser tosco a contar con unos movimientos absolutamente precisos y elaborados, capaces de dar vida a ese personaje que andaban buscando… Ese es Justino.
Los escenarios se han hecho del mismo modo, a partir del dibujo y con una importante labor de investigación a sus espaldas, para conseguir que los distintos elementos se ajustaran a la realidad. ¡Y la música! ¿Qué decir de la música? Para los creadores de este cortometraje es otro elemento narrativo fundamental y de hecho, como siempre ocurre, es ese añadido mágico que hace que nos emocionemos desde el principio. Acompaña, sin duda, la historia y el personaje, creando una atmósfera absolutamente entrañable. También han jugado a elaborar todos aquellos sonidos que deberían haber sonado durante cada escena (el tintineo de las llaves colgadas en el cinturón de Justino, la pelota rebotando en el maniquí, el papel que cae al suelo…). En el vídeo que tenéis a continuación podréis ver algunos secretos de cómo ha sido elaborado el anuncio.
http://www.youtube.com/watch?v=3d023eB3OEU
Un conjunto elaborado con mucho cariño y ajustado de corazón. ¿Será por eso que siempre consiguen emocionarnos tanto? Que lo disfrutéis y, si puede ser, ¡que os toque el décimo!
