La red social de los 140 caracteres ya no lo es tanto. Y es que acaba de tomar drásticas medidas en lo que es su funcionamiento habitual. Así, Twitter ha decidido eliminar el límite de caracteres a la hora de escribir mensajes directos, también conocidos como DM (direct messages). Algo que modifica notablemente su experiencia en el ámbito privado, transformando una herramienta que era una mera vía para contactar entre usuarios, en lo que ahora podría entenderse como un sistema de mensajería al uso. Eso sí, el resto de mensajes o tweets permanecen igual.
De tal forma, y a partir de hoy mismo, cualquier usuario de la red social Twitter puede escribir mensajes ilimitados en el ámbito privado. Basta con acceder al perfil de un seguidor o seguido, y seleccionar la opción de enviar un mensaje. Algo que antes estaba limitado en 140 caracteres, y que implicaba tener que enviar varios mensajes seguidos a dicho usuario para poder exponer claramente la idea, proposición o concepto que se está debatiendo fuera de la vista del resto de seguidores. Ahora este proceso es mucho más cómodo, ya que puede aglutinarse todo en un mismo mensaje.
El cambio no va a ser radical ya que, como comentamos, Twitter no limitaba la cantidad de mensajes que se podían enviar, aunque fueran más escuetos. Sin embargo, da pie a que las conversaciones privadas fluyan de forma mucho más cómoda y sencilla. Algo que acerca esta red social al ámbito de la mensajería, pero que, sobre todo, elimina un buen número de notificaciones y trabas en la experiencia a la hora de comunicarse por mensaje directo.
Pero la estrategia de Twitter va más allá. Y es que, además de la comodidad para los usuarios de a pie, esta nueva característica es realmente útil para los profesionales que desarrollan su trabajo a través de la red social. Cuestiones que ahora permiten dar explicaciones, pactar colaboraciones o concretar cualquier detalle sin abandonar la aplicación, o sin tener que intercambiar datos como números de teléfono y correos electrónicos, desde los que interactuar sin límites.
Esta característica se suma a los cambios que Twitter ha estado aplicando en este ámbito durante los últimos meses. Y es que no debe cambiar sus limitaciones y personalidad, que le permiten seguir siendo fuente de información inmediata, concreta y concisa, pero sí ha sabido adaptarse mejor en el ámbito privado. Cuestiones como permitir contactar mediante DM o mensaje directo con personas a las que no se sigue, colocar un botón que fomente este canal privado en las páginas de perfil de los usuarios, o la posibilidad de contestar cualquier mensaje de un desconocido (no seguidor), entre otros detalles. Algo que apuesta por renovar la experiencia de uso que queda de espaldas a la galería.
En definitiva, un nuevo intento por parte de Twitter para tratar de evitar la mala racha que está atravesando, cayendo mes a mes en número de usuarios e importancia. Una red social que sigue siendo indispensable para medios de comunicación, críticos y humor, pero que no termina de convencer a todos los usuarios. Quizá apostando por la mensajería privada ilimitada cambie el panorama. Esta función ya ha comenzado a estar presente de forma escalonada tanto desde la web como mediante las aplicaciones para móviles y otros clientes de gestión.
