Ni el Samsung Galaxy S6 ni el Galaxy S6 Edge cuentan con certificación IP68. A diferencia de la generación anterior, los nuevos dispositivos insignia de la surcoreana no son resistentes ni al agua, ni al polvo, ni a demás inclemencias. Hay una poderosa razón sobre el porqué la firma no habría dotado a sus gama alta con esta característica: Ha estado trabajando en una versión todo terreno, la cual muy posiblemente se llamará Galaxy S6 Active.
El objetivo principal de Samsung sería el de diferenciar muy bien sus teléfonos dentro de la misma gama. Lógicamente, no tiene sentido lanzar un teléfono ultra resistente si ya hay otros modelos que lo son. Por tanto, este Galaxy S6 Active estaría pensado para todos aquellos que quieran disponer de un dispositivo que soporte golpes, caídas, agua…, pero que además cuente con prestaciones punteras.
Si os fijáis en las imágenes, esta versión cambia radicalmente el diseño respecto al de la versión estándar. No es tan estético, aunque sí más funcional. Encontramos en su parte frontal unos botones físicos, que ya hemos visto en otros modelos Active anteriores. Como se puede apreciar, también es mucho más grueso que el Galaxy S6 original. El Galaxy S6 Active contaría con un grosor de 8,8 milímetros y una altura y anchura de 14,68 x 7,36 cm, respectivamente. Si le damos la vuelta, en su parte trasera vemos como la cámara está más protegida, además la carcasa es más robusta, lo que se traduce en menos sustos cada vez que veamos el dispositivo en el suelo.
En lo que respecta a las especificaciones, el Galaxy S6 Active es una gota de agua del modelo estándar, aunque con alguna novedad. Según las filtraciones, el nuevo teléfono montaría una pantalla de 5,1 pulgadas y resolución QHD. En su interior nos encontraríamos con un procesador Exynos 7420, que ha sido el elegido por la surcoreana este año en lugar del polémico Qualcomm Snapdragon 810. Este chip iría acompañado de una memoria RAM de 3GB. Por tanto, queda completamente asegurado un buen rendimiento, que nos permitirá trabajar con soltura sin temor a estar en un lugar poco amigable para un teléfono, como por ejemplo la playa o piscina, ahora que se acerca el verano.
El apartado cámara volvería a estar compuesto por una principal con sensor de 16 megapíxeles y por una secundaria con sensor de 8 megapíxeles. También se espera, que el nuevo Galaxy S6 Active vaya gobernado por Android 5.0 Lollipop. De momento, no sabemos con que versión del sistema llegará, suponemos que será con una de las últimas. Hasta aquí todo igual al Galaxy S6, por lo que os preguntaréis donde está la novedad. El Galaxy S6 Active incorporaría una batería bastante mayor. Se habla de una de 3.500 mAh, que superaría considerablemente a la de la versión estándar, que recordemos es de 2.600mAh. Como se puede apreciar en la imagen, será la operadora americana AT&T la encargada en comercializar este dispositivo en los Estados Unidos. Desconocemos de momento a qué otros países llegará y, lo más importante, cuando lo hará y a qué precio.