Ya sabes que en la era de las pantallas táctiles parece que todos los niños ya no llegan con un pan bajo el brazo, sino con un tablet. Y es que prácticamente todos, sin excepción, se saben manejar perfectamente con una de estas pantallas ya desde bien pequeñitos. Un estudio publicado por Time lo confirma: más del 33% de los niños menores de un año han utilizado un teléfono inteligente o una tableta. Hace apenas unos días te contábamos que más del 40% de los niños españoles tenía su propio ordenador. Ese mismo estudio, llevado a cabo por la compañía HP, nos indicaba que el primer contacto de los más peques de la casa con las nuevas tecnologías móviles solía producirse a los tres años, aunque lo cierto es que algunos padres reconocían haberles prestado sus equipos con anterioridad. Para el informe que nos ocupa se han entrevistado a 370 padres de niños de entre seis meses a 4 años de edad.
La gran mayoría de hogares cuentan con, al menos, una televisión en su salón. Hablamos de un aplastante 97%. Pero, ¿qué hay acerca del resto de dispositivos electrónicos? Pues bien, resulta que los porcentajes son prácticamente igual de elevados, lo que coincide con el estudio de HP. El 83% de las familias también tienen una tableta y el 77% disponen de un teléfono inteligente o smartphone. Sobre el uso real que los niños han hecho de estos dispositivos es ciertamente sorprendente. Según estas informaciones, el 36% de los niños menores de un año han tocado o desplazado la pantalla en alguna ocasión, mientras que el 24% han hecho alguna llamada telefónica. El 15% han utilizado aplicaciones y un apabullante 52% han visto programas de televisión, lo que refuerza el impacto que tienen los audiovisuales sobre bebés tan pequeños y la vinculación, forzada y prácticamente por inercia que padecen los menores con respecto a los contenidos televisivos.
De hecho, la propia encuesta nos revela que la mayoría de padres utilizan estos dispositivos (con sus contenidos a cuestas) para tener entretenidos a sus hijos. Estamos hablando de un nada despreciable 60%. Dentro de este porcentaje, un 73% de los padres confiesan dejar estos aparatitos a sus hijos mientras están haciendo tareas en casa. En un 65% de los casos les viene bien para calmarlos, lo que sin duda resulta revelador con respecto a la capacidad o tiempo que tienen los padres para gestionar la educación de sus hijos. A todo esto tenemos que añadirle el sorprendente dato que confirma que un 29% de los niños se acuestan con un teléfono inteligente o tableta. Algo debe ir mal cuando un 30% de los padres encuestados reconoce haber discutido con su pediatra acerca del uso que sus hijos hacen de estos dispositivos.
Y tú, ¿a qué edad les dejaste la tableta o smartphone a tus hijos?
