Canon acaba de lanzar su cámara digital réflex más compacta, la EOS 100D, en color blanco. Ambas versiones, la negra y la blanca, tienen un cuerpo hecho de una aleación de aluminio y resina de policarbonato con fibra de carbono y de vidrio. Eso aporta resistencia a la vez que ligereza; y es que el cuerpo pesa unos cuatrocientos gramos y ocupa muy poco espacio. También acaba de lanzar una versión blanca del objetivo zoom Canon EF-S 18-55 mm f/3,5-5,6 IS STM para acompañarla, que aporta una gran versatilidad, tanto para hacer retratos como para tomar panorámicas o paisajes. La Canon EOS 100D es una máquina dirigida a fotógrafos principiantes. Su uso es muy intuitivo y ofrece numerosos automatismos para facilitar al máximo la tarea de tomar fotos y vídeos. Puede capturar fotografías de 18 megapíxeles con condiciones de escasa luminosidad, gracias a la elevada sensibilidad ISO 12800.
El sensor de imagen en formato APS-C es un CMOS de 22,3 por 14,9 milímetros con filtro de colores primarios y un ratio de aspecto 3:2, mientras que el procesador de imagen es un DIGIC 5. Puede realizar disparos continuos a 4 fps (cuadros por segundo); es velocidad de mantiene para 7 imágenes en RAW y para 28 imágenes en JPEG. Igualmente, puede grabar vídeos Full HD (1080p). Ofrece diversos efectos creativos, y el disparo con efecto extra permite captar la misma imagen con filtro y sin filtro simultáneamente. Si el usuario tiene dudas, puede consultar la guía de funciones a través de la pantalla táctil. La pantalla, por cierto, es una LCD Clear View II con una diagonal de 3 pulgadas, que permite enfocar y disparar con un solo toque.
Almacena todas las imágenes en tarjetas de memoria que pueden ser SD, SDHC o SDXC (UHS-I). Puede guardar simultáneamente las fotos en RAW y JPEG grande. Los vídeos se guardan en formato MOV (vídeo H.264 con sonido PCM lineal) y pueden tener un tamaño máximo de archivo de 4 GB o una duración máxima de 29 minutos y 59 segundos. Incorpora una salida HDMI con conector mini y una entrada para micrófono externo con conector minijack (3,5 mm). También tiene un puerto USB 2.0 que incluye una salida de vídeo analógica. Lleva un flash integrado, que tarda tres segundos en recargarse, pero se le puede añadir uno externo gracias a la zapata caliente. Puede imprimir directamente las imágenes (sin necesidad de ordenador) en impresoras compatibles con PictBridge.
El objetivo zoom Canon EF-S 18-55 mm f/3,5-5,6 IS STM incorpora un estabilizador óptico de imagen y un anillo de enfoque manual; puede trabajar a una distancia mínima de enfoque de 0,25 metros y su motor STM resulta silencioso durante las grabaciones de vídeo. El cuerpo de la cámara con batería y tarjeta de memoria incluidas pesa 410 gramos. Sus dimensiones son 116,8 por 90,7 y por 69,4 milímetros. La Canon EOS 100D está disponible a un precio de venta al público de 620 euros (sólo el cuerpo), y el paquete de una Canon EOS 100D más un objetivo Canon EF-S 18-55 mm f/3,5-5,6 IS STM cuesta 719 euros. El precio es el mismo para la versión blanca que para la negra.