El Samsung Galaxy S5 podría llegar al mercado equipado con un escáner de huellas dactilares. Y aunque algunos medios han apuntado a la posibilidad de que esto no sea así, el medio coreano ET News acaba de indicar que Samsung no subcontratará a otras empresas para que fabriquen los módulos de reconocimiento que son necesarios para esta función. De hecho, parece que será la propia firma la encargada de poner en marcha internamente el proceso de fabricación. Y aunque en un principio podría hacerlo ella misma, se espera que para obtener una cantidad de sensores suficiente, Samsung externalice la producción. No hay que perder de vista que el escáner llegaría integrado en el Samsung Galaxy S5, un teléfono que podría superar los 40 millones de unidades vendidas en muy poco tiempo, tal como ocurrió en su momento con el vigente Samsung Galaxy S4. Pero, ¿cómo sería el sensor de huellas que promete instalar Samsung en su próximo buque insignia? ¿Tendrá algún parecido con el que se ha integrado en el iPhone 5S?
Pues bien, este mismo documento divulgado por ET News informa de que a diferencia del último iPhone 5S de Apple, el Samsung Galaxy S5 utilizará un sensor de huellas dactilares tipo swype. Esto significa que para utilizarlo, los usuarios tendrían que deslizar su dedo sobre la superficie, en lugar de centrarlo en un área determinada. Se trataría, sin lugar a dudas, de un sensor mucho más práctico para los fabricantes. Y es que podría ser ubicado en cualquier lugar del dispositivo y no solamente en la parte central, como ocurre con el iPhone 5S. En este punto tenemos que recordar que hace ya algunas semanas, se hizo público el registro de una patente de Samsung en la que aparecía un sensor de huellas dactilares ubicado en la parte trasera del equipo. Se trataba de una pieza rectangular, situada en el margen superior derecho del teléfono. En ese momento no tuvimos ocasión de saber si el dispositivo llevaba integrado un sensor de huellas dactilares, pero teniendo en cuenta estas informaciones, no estaríamos – en absoluto – ante una idea descabellada.
Otra posibilidad interesante, indican los expertos, es la que permitiría el almacenamiento del sensor en la pantalla del equipo. Se trataría de una excelente fórmula para aprovechar el espacio al máximo y permitir que parte de la superficie frontal del Samsung Galaxy S5 esté completamente dedicada al panel principal.
El anuncio oficial de la llegada del Samsung Galaxy S5 podría producirse el próximo 24 de febrero, jornada en la que Samsung tiene previsto celebrar su evento central. Según todos los rumores, la quinta generación del Galaxy S llegaría al mundo equipada con una gran pantalla Súper AMOLED HD de 5,25 pulgadas y una amplia resolución de 2560 x 1440 píxeles. Podría funcionar con dos tipos de procesadores distintos: un Qualcomm Snapdragon 805 o un Exynos 6, desarrollado en el seno de la propia Samsung. Ambos contarían con 3 GB de RAM y con una excelente cámara fotográfica de 16 megapíxeles. Quién sabe si con un sensor ISOCELL.
Por lo demás, parece que guardará compatibilidad con redes LTE/4G, 3G y WiFi y que contará con un amplio listado de opciones y funciones inteligentes de alto nivel. Ayer mismo supimos, además, que el Samsung Galaxy S5 contaría con una batería de iones de litio con capacidad para 3.200 miliamperios, capaz de ofrecer a los usuarios una autonomía mucho más duradera y estable. Se presentaría en dos versiones distintas, una de 32 GB y otra de 64 GB, aunque ambas podrían ampliar su capacidad con tarjetas microSD de hasta 64 GB.
