En los últimos meses, Nokia ha sorprendido al mundo con lanzamientos del todo inesperados. Hace apenas unas semanas presentaba su primer phablet con una pantalla de más de cinco pulgadas, el Nokia Lumia 1520, y daba a conocer una tableta llamada Nokia Lumia 2520 que promete inaugurar el ciclo de fabricación de grandes pantallas dentro del catálogo de la finlandesa. Pues bien, las últimas filtraciones nos hacen pensar en que el corazón de la innovación de esta factoría no tiene el menor propósito de detenerse. Nada más lejos de la realidad. Y es que la compañía acaba de registrar una patente que respalda la fabricación de baterías flexibles. Tal como lo lees. El invento que aparece en estos gráficos no es otra cosa que una batería plegable compuesta por una gran serie de células flexibles. Se trataría, según los expertos, de una tecnología que permitiría fabricar teléfonos mucho más pequeños y delgados.
¿Será esta la batería que en un futuro llevarán los próximos dispositivos Lumia? A estas alturas todavía es difícil afirmarlo, pero lo cierto es que la tecnología promete. No hay que perder de vista que firmas tan punteras como Samsung o LG ya han dado a conocer al mundo sus primeros teléfonos móviles flexibles: el Samsung Galaxy Core o el LG G Flex. Como indicábamos al principio, aparte de propiciar la fabricación de teléfonos más finos y ligeros, las baterías flexibles de Nokia podrían integrarse en los denominados teléfonos con pantalla curva. De hecho, los principales problemas que plantean estos smartphones – más allá del panel principal – tienen que ver con la arquitectura de la batería. La compañía LG empleó una batería flexible para la fabricación de su equipo, pero Samsung trabajó con una pieza idéntica a la de cualquier móvil inteligente. Era, todo hay que decirlo, un poco más rectangular y alargada.
Una batería más flexible – o flexible por completo – permitiría a los fabricantes trabajar con teléfonos mucho más curvados y quién sabe si enrollables, tal como habíamos visto en algunos conceptos.
Sin embargo, el Daily Mail informa de que Nokia ya presentó esta misma patente en marzo de este año 2013. Lo que quiere ahora la firma es resolver los problemas que están generando las baterías de los equipos portátiles, categoría en la que también entrarían los smartwatch o relojes inteligentes. De hecho, la propia patente indica que el tamaño de la batería (denominada aquí Nokia Battery Pack) podría ser modificada en función del tamaño de cada dispositivo.
El informe de esta patente llega justo después de la filtración de otro registro de Nokia en la Oficina de Patentes y Marcas (USPTO) estadounidense para un reloj inteligente de pulsera que contaba con varias pantallas y que lucía un aspecto bien distinto al de cualquier smartwatch que hayamos podido ver hasta la fecha. Si Nokia presentara un reloj inteligente de estas características, a la firma no le quedaría otra que competir con compañías como Samsung o Sony Mobile, puesto que ya cuentan con esta clase de dispositivos en el mercado. Google y LG podrían hacer lo propio en los próximos meses. Mientras no llega ese momento, te dejamos con un concepto del reloj que Nokia podría presentar en el futuro.