Probablemente sea una de las canciones más cantadas del planeta. La que sí o sí, cantamos una vez por año para cada uno de nuestros amigos y familiares. Sí, lo has adivinado. Es el «Happy Birthday to You» aquí llanamente bautizado como «Cumpleaños Feliz». La cantamos tan alegremente y sin prestar atención a sus notas, así que nunca habríamos podido imaginar que la pieza tuviera derechos de autor – ¡y qué derechos! – puntualmente remunerables a una de las compañías más poderosas del planeta. Sí, los derechos del Cumpleaños Feliz son de Warner/Chapel, una filial de la discográfica Warner Music. Pero lo más impresionante no es que la canción esté protegida. Lo que llama la atención, según las últimas informaciones de The Verge a raíz de un caso muy concreto, es que usar la canción cuesta 1.500 dólares, unos 1.100 euros al cambio actual que tendrías que pagar religiosamente a la multinacional. Cantarla en público podría ser, desde luego, el regalo más caro que nunca habrías hecho a tu madre.
Se percató de este sorprendente caso Jennifer Nelson, una cineasta estadounidense que estaba trabajando en un documental precisamente sobre la canción de cumpleaños. Está claro que tenía que utilizarla de manera obligatoria, así que Jennifer pagó los 1.500 dólares, no sin antes advertir a la compañía que denunciaría el caso ante los tribunales por considerar que se le estaban cobrando derechos por una canción de carácter popular. Y así lo hizo. Nelson ha presentado este jueves una demanda en los tribunales federales de Manhattan contra la discográfica Warner/Chappel.
Lo cierto es que como buena documentalista sabía que la canción del Cumpleaños Feliz no es más que una adaptación de la melodía «Good Morning to All» fechada a finales del siglo XIX y escrita por dos hermanas llamadas Mildred J. y Patty Smith Hill Con el tiempo, el tema se adaptó y se convirtió en la melodía de todos los cumpleaños. El caso es que en 1988 Warner fue más lista y compró la cancioncilla «Good Morning to All» a la pequeña empresa que la tenía registrada previo pago de 25 millones de dólares. Lo que quiere Nelson ahora es demostrar que la adaptación al «Cumpleaños Feliz» es universal y que ha sido creada por la gente. En esta cruzada contra Warner, la cineasta quiere «devolver la canción» a la humanidad después de que la discográfica se haya llevado al bolsillo más de 2 millones de dólares (1,4 millones de euros) hasta la fecha.
Esta no es, sin embargo, la primera ocasión en la que alguien denuncia este hecho. Ya en 1994 el cineasta Steve James tuvo que abonar 5.000 dólares (unos 3.700 euros) por usarla en su documental Hoop Dreams, con el que obtuvo una nominación a los Óscar. De momento, sabemos que Nelson tiene la firme intención de liberar la canción de las garras de Warner. No será fácil, teniendo en cuenta que cada año la discográfica recibe sustanciosos beneficios por tenerla registrada.
Cuqndo Beethoven utilizó esa melodía en un homenaje a Wellington ya era una pieza tradicional.
Ay, que no! Me he confundido con la de «Es un muchacho excelente»
Excelente dato..!!!
Ya nunca mas la volvere a cantar gratis… XD
Pobre los compositores si no perciben sus regalías;la Warner es la representante de los autores y compositores y recibe un porcentaje por cobrar al usuario el derecho de autor