Los dispositivos electrónicos portátiles como los smartphones, están expuestos a caídas, golpes y todo tipo de accidentes. Son equipos que manejamos a menudo y siempre llevamos encima, por tanto el riesgo de que sufran algún daño se multiplica. La mayoría de usuarios solemos echar mano de fundas protectoras que salvaguarden la integridad de nuestros preciados dispositivos, que además de útiles suelen ser bastante caros y por nada del mundo queremos que se rompan. Sin embargo elegir una funda adecuada puede ser tarea complicada. El mercado de accesorios de móviles está saturado de distintos modelos de fundas de todas las formas, tamaños, colores y casi sabores. Elegir bien el tipo de carcasa puede significar la diferencia entre tener un móvil o un trozo de plástico roto, ofrecemos algunos consejos que faciliten la tarea.
- En primer lugar debemos preguntarnos para qué queremos una carcasa. Aunque el motivo principal es la protección, también hay otros factores como la estética de la misma o la posibilidad de añadir nuevas funciones como batería extra o soporte para poner el terminal en vertical. Puede darse el caso de que queramos una carcasa que tenga una apariencia más simple o por el contrario algo más recargado y llamativo, esto va a gusto de cada usuario.
- Después hay que pensar el grado de protección que necesita nuestro smartphone. Si solemos usar el móvil en casa o el trabajo no hay tanto peligro como si salimos a hacer senderismo con él o si lo llevamos sujeto al manillar de la bicicleta a modo de GPS. En el caso de los usuarios más extremos, existen carcasas muy rígidas que protegen hasta de los golpes más fuertes, por ejemplo el modelo Defender de OtterBox es prácticamente irrompible. También existen modelos sumergibles o que protegen de salpicaduras, algo que también puede venir bien en accidentes fortuitos en los que se derrame líquido sobre la mesa y alcance nuestro teléfono.
- La pantalla es el punto débil de todo smartphone, es la pieza clave y si se rompe también suele ser la más cara de reparar. Si lo que más nos preocupa es la pantalla podemos probar con una de las miles de carcasas que cuentan con una solapa que cubre el panel. Samsung cuenta con un modelo llamado Flip Cover que es compatible con sus móviles de gama alta y resulta muy cómodo.
- El diseño que tenga la funda protectora es un aspecto decisivo para muchos usuarios. Por un lado nos puede interesar que la carcasa sea lo más discreta posible. Uno de los inconvenientes de estos accesorios es que ocultan parte del diseño de nuestros terminales y esto no siempre gusta. Hay fundas muy delgadas y casi transparentes que pueden pasar muy desapercibidas, aunque en estos casos la protección no es tan elevada. En el otro extremo están los usuarios que prefieren una funda con un diseño muy evidente. Por ejemplo CaseMate tiene la serie Creatures que emula la apariencia de animales y es muy llamativa. También hay muchas fundas decoradas con ilustraciones o pinturas famosas.
Conclusión
Resulta imposible recomendar una carcasa para todos los públicos ya que cada usuario tiene unas necesidades y preferencias muy concretas. Sin embargo, podemos decir que en líneas generales la decisión debe tomarse atendiendo a dos conceptos: estética y nivel de protección. Cada usuario debe analizar sus gustos y el nivel de «maltrato» al que puede someter a su smartphone para encontrar una funda protectora que se adapte a sus necesidades. No hemos hablado del precio, pero lógicamente también es un factor muy importante. No obstante no supone un problema grave dada la enorme oferta de carcasas disponible.
Me encanta este artículo 🙂
Son mejores las carcasas de silicona flexible o las rígidas de acrílico/policarbonato?
yo no consigo para mi sansung mega 5.8 y ni idea de donde conseguir. Vivo en Venezuela en la region centro occidental