Los rumores tecnológicos son el pan de cada día de los medios de comunicación. Todos los días se filtran, sea o no sea de manera accidental, hojas y más hojas con características técnicas hipotéticas, con resúmenes de rendimiento de terminales que todavía desconocemos e imágenes que quieren mostrarnos la calidad y los materiales de los smartphones del futuro. Hoy ha ocurrido de nuevo. Tenemos sobre la mesa la ficha de un misterioso dispositivo que sale de la factoría surcoreana Samsung. Nos referimos a un denominado Samsung SCH S960L, un dispositivo que según todas las teorías funcionaría con el sistema operativo de Google, Android. La cosa está en que su nombre de pila – seguramente de carácter interno – no se asemeja en nada si lo comparamos con las denominaciones técnicas que hasta ahora se han dado a conocer. La ficha que te presentamos está sacada de unos benchmarks o pruebas de rendimiento del medio GLBenchmark, especializado en este tipo de análisis.
El Samsung SCH-S960L funciona con Android 4.1.2 (Jelly Bean), una de las últimas versiones de este sistema operativo, aunque lo cierto es que no se trata de la última, Android 4.2 (Jelly Bean). La existencia del teléfono ha sido confirmada a través del medio GLBenchmark y lo cierto es que estamos ante un terminal de características envidiables. Se trataría, sin lugar a dudas, de un smartphone de alta gama, sobre todo teniendo en cuenta la maquinaria interna y las especificaciones de software que se han dado a conocer. En efecto, el S960L sería un smartphone o teléfono móvil inteligente equipado con un procesador Qualcomm Snapdragon MSM8960 de doble núcleo, funcionando a una frecuencia de reloj de 1,5 GHz. Contaría con una pantalla con unas dimensiones físicas que por ahora se desconocen, aunque sabemos que su resolución final sería de 720 x 1280 píxeles. La prueba, como te decíamos, está hecha con la versión 4.1.2 de Android, lo que confirmaría que el teléfono llegaría funcionando con esta plataforma.
No hay más detalles acerca de su ficha técnica. La compañía Samsung no ha ofrecido detalles oficiales al respecto, de manera que tendremos que ser pacientes y esperar a una posible presentación oficial. Tampoco existe rastro alguno de su existencia en las oficinas de la FCC, la oficina federal estadounidense que regula la entrada de dispositivos en norteamérica. Aunque lo cierto es que esto no significa necesariamente nada. No sería el primer teléfono que se daría a conocer de manera exclusiva en Europa o incluso en territorio oriental. Podríamos estar, todo hay que decirlo, ante una segunda versión del Samsung Galaxy S2 o del Samsung Galaxy S3. La coreana suele idear nuevas ediciones con algunos cambios significativos, pero a un precio bastante más económico.