El lector de audio portátil de Apple lleva en el mercado once años en sus distintas versiones. El año pasado los de Cupertino presentaron tres nuevos modelos: un iPod Touch renovado con pantalla Retina y grabación de vídeo en alta definición, un iPod Suffle y un iPod Nano con una interfaz multitáctil. La compañía sigue insuflando vida a un producto maduro de buen rendimiento. Durante el tercer trimestre de 2012, se han vendido 6,8 millones de unidades de iPod, un diez por ciento menos que el mismo periodo del año anterior. Sin embargo, la facturación derivada del iPod todavía tienen impacto en la cuenta de resultados de la compañía; en el tercer trimestre de este ejercicio representa 1.060 millones de dólares.
Respecto a los resultados durante ese tercer trimestre, los analistas financieros han destacado que las ventas el iPod y el iPad han rebasado las expectativas, mientras que las del iPhone y las de los ordenadores Mac han resultado decepcionantes. Está claro que Apple todavía va a conservar en cartera un producto de tipo “vaca” que puede explotar. Incluso a pesar de que el iPod represente solamente un 3 por ciento del negocio de la compañía. Desde su lanzamiento en el año 2001, la combinación de iTunes más iPod lograba revolucionar la industria de la música. Y, durante muchos años, el iPod ha definido el carácter de la marca.
No sería hasta el año 2007, con la llegada del iPhone, cuando el iPod perdía su cetro, para vivir a la sombra del smartphone. Los consumidores veían que el iPhone reunía todas las prestaciones de un iPod, por lo que podían ahorrarse dinero evitando comprar un dispositivo adicional. A pesar de todo, Apple no ha dejado de lado al iPod. Durante la reciente presentación del iPhone 5, la compañía mostraba dos nuevos modelos de reproductores de música: un nuevo iPod Touch y un iPod Nano.
La familia de reproductores iPod genera miles de millones de dólares al año. La marca Apple puede permitirse el lujo de vender sus productos a precios más elevados que sus competidores, por lo que sus márgenes son altos.
En octubre de 2001, Apple publicitaba el primer iPod bajo el lema de “mil canciones en tu bolsillo”. A día de hoy, el iPod no sólo está vivito y coleando, sino que además sigue desempeñando un papel relevante. ¿Por qué el iPod todavía es importante? Don Reisinger hace en la revista Fortune un análisis interesante. Destaca que cada compra de un iPhone o un iPad en realidad es una venta de un iPod. Esos dispositivos integran todas las funciones que ofrecen los modelos de iPod actuales. Si el iPod fuera un simple reproductor de audio portátil, iría camino de la extinción. En cambio, la situación es distinta si el iPod se entiende como una plataforma que permite a los consumidores reproducir música y vídeo en movilidad. Entonces, el iPod ha mutado para convertirse en componente de otros productos de la casa. No está muriendo, sino entrando una nueva de etapa.