Los Sony MDR-ZX700 son unos nuevos auriculares cerrados de tipo circumauricular. Se adaptan bastante bien a distintos tamaños de orejas. Una vez bien colocados, consiguen dejar fuera la mayor parte del ruido ambiente. Aíslan bien del exterior, algo que los convierte en aptos para realizar escuchas dentro de oficinas transitadas o de paseo por la calle en compañía de un reproductor de audio portátil.
Están bastante bien construidos, y el tacto de la diadema y de las almohadillas es agradable. De hecho, las almohadillas acolchadas están recubiertas de uretano. Otro detalle que da idea de su destino es el cable, que es plano para dificultar que se enrede. El cable está soldado a la carcasa izquierda y tiene una longitud de 1,2 metros, que es suficiente para pincharlo a un lector MP3. De todos modos, dentro de la caja hay un alargador de 1,8 metros.
El conector del cable, que está chapado en oro, es un minijack estéreo (3,5 mm). Estos auriculares de Sony aguantan un potencia de entrada de hasta 2.000 mW (milivatios). Ofrecen una sensibilidad de 106 decibelios y operan en un rango de frecuencias bastante amplio (desde 5 a 40.000 hertzios). Carecen de control de volumen integrado en el cable, pero tampoco es necesario al tener el lector MP3 o el teléfono móvil con reproductor de música tan cerca.
Los diafragmas tienen un diámetro de 50 milímetros y los imanes están hechos de neodiminio. Con un peso de 260 gramos, son relativamente ligeros para ser de tipo circumauricular y tener diadema. Están disponibles en varios colores, aparte del negro clásico: azul, blanco y rojo. El precio de venta al público de los Sony MDR-ZX700 alcanza los 110 euros.