Si posees archivos que no querrías que por nada del mundo cayeran en manos ajenas, tienes varias opciones. Una de ellas es encriptarlos y, otra, almacenarlos en un pendrive y esconderlos con celo de miradas indeseadas. La firma japonesa Thanko propone una tercera alternativa de seguridad. Consiste en un candado para tu memoria flash o cualquier conector USB.
Su mecanismo es muy sencillo. Se trata de una especie de capucha que se ajusta en la parte superior del dispositivo. La combinación inicial es 000. El usuario, mientras permanezca abierto, puede asignarle el código de tres dígitos que desee con ayuda de una aguja o un punzón. Y listo. Claro que si alguien pone un gran empeño, no tendrá problema en forzar su apertura con ayuda de artilugios tan poco sofisticados como martillos, mazas, etc. Tal vez deberíamos plantearnos otras medidas disuasorias, como la electrificación.
El candado es compatible con conectores USB que posean salidas macho iguales o inferiores a los 4 milímetros de ancho. En cuanto a largo, admite 11,5 mm como máximo. Se encuentra disponible en la web de Thanko y su precio es de 9 dólares, unos 7 euros al cambio actual. Una opción menos aparatosa y cara que la caja fuerte Sentry Safe USB.
Foto inferior de zebble / Vía: Thanko