En plena era de las pantallas planas hay que tener agallas para seguir vendiendo un televisor de tubo como los de antes. Salvo que el fabricante recurra a la gallina de los huevos de oro: convertirlo en un artículo relacionado con La Guerra de las Galaxias. Basta con ponerle la forma del famoso casco de Darth Vader y seguro que algún friki de la mítica saga picará tarde o temprano.
A su favor hay que decir que por lo menos aporta un par de funciones interesantes. Viene con un reproductor DVD integrado, para esas maratones audiovisuales en las que te propones ver todas las películas de la serie (la primera trilogía, la segunda, la versión remasterizada, las escenas inéditas, los documentales…). El lector también admite formatos como CD, CD-R o CD-RW, pero no es compatible con los discos DVD grabables.
En cuanto al diseño, pues tampoco es que sea nada del otro jueves. Aunque presenta algún detalle curioso, como el altavoz situado justo en lugar donde el villano tiene el aparato que le ayuda a respirar, y que produce ese sonido tan característico (que esperemos no se moleste en reproducir de verdad). Y sobre todo, el mando a distancia, cuyas formas están inspiradas en las espadas láser de la peli.
Pero incluso con esos alicientes el televisor todavía resulta demasiado caro. 130 libras (165 euros al cambio) es un precio sólo admisible para los coleccionistas más fervientes. Además, ocupa bastante espacio para una pantalla de tan sólo 14 pulgadas. Eso sí, lucirá estupenda al lado del teléfono R2-D2 para completar tu escritorio temático de Star Wars.
Vía: Geek Alerts
EStaria bueno que tenga fotos , igual me lo imagino 😛
Hasta luego