¿Cuántas veces no te has arrepentido de haber dado al botón de «Enviar»? Un botón muy fácil de pulsar y que puede provocar mensajes indeseados. Y no nos referimos al spam. Nos referimos a los mensajes apasionados o incluso con destino equivocado. Es lo que pasa cuando alguien está demasiado enfadado, estresado o incluso cuando se ha tomado unas copas de más. Dentro de la variedad de aplicaciones que ofrece Google, acaba de aparecer una nueva herramienta cuanto menos, curiosa. Se trata de Mail Goggles, el primer alcoholímetro para e-mails, que con unas sencillas operaciones matemáticas mide el estado de consciencia en el que se encuentra el emisor de mensajes.
Y si uno no es capaz de realizar unas sencillas operaciones matemáticas, es que puede haber bebido más de la cuenta. Encima, para complicar la operación, el usuario tiene un tiempo limitado para hacer los cálculos. Todo para evitar mandar mensajes con fiebre del sábado noche.
La herramienta es una de esas invenciones de Google de su laboratorio de experimentos, llamado «Google Labs«. Para acceder a ella, sólo hay que entrar en el servicio de correo electrónico Gmail y cambiar el idioma de la aplicación al inglés, dentro del apartado «Configuración» al que se accede desde el enlace situado en la parte superior derecha. Después, de nuevo en configuración (aunque ahora se llamará «Settings«) tenemos que ir a la pestaña «Labs«. Una vez dentro, podemos encontrar este Mail Goggles muy abajo de la página de herramientas adicionales de Gmail.
Una vez activada, Google formulará unas cuantas cuestiones matemáticas, a las que el usuario deberá responder correctamente. En caso de que el control dé positivo, el sistema nos alertará de que no estamos en condiciones de escribir mails a los demás y lanzarlos a modo de arma arrojadiza.
Lo curioso de esta historia, es que el programa se activará de forma automática las noches de los fines de semana, justo cuando algunos son más proclives a darse a esto de la bebida. Aunque desde la pestaña de «General» en Ajustes podemos personalizar la hora y los días de funcionamiento de este peculiar alcoholímetro. Incluso se puede hasta ajustar el nivel de dificultad de las pruebas a pasar. Todo un invento éste de Google que nos ahorrará más de un mensaje fruto de un ataque de cólera, borrachera o pasión.
Foto de Thomas Hawk / Vía: Gmail Blog