El Nokia 7210 Supernova es el único modelo de la nueva familia de teléfonos coloridos de Nokia que no tiene carcasas intercambiables. Pero es el terminal más delgado (10,6 mm de grosor) y ligero (casi 70 gramos sin batería) de todos los presentados, con un diseño de tipo tableta que estará disponible durante el último trimestre del año en dos acabados distintos: negro con líneas azules y blanco con líneas rosas.
Lleva una pantalla de dos pulgadas, cámara de dos megapíxeles que puede grabar vídeo a diez imágenes por segundo, reproductor MP3, radio FM y conexión Bluetooth con perfil A2DP (es decir, puede trasnferir pequeños archivos sin cables y usar unos auriculares inalámbricos para escuchar la voz de las llamadas y las canciones).
Dispone de una memoria interna de 30 MB que podemos ampliar con tarjetas de memoria microSD de hasta 2 GB, y su batería da para dos horas en conversación y 250 en espera. El precio de este telefóno, el más sencillito de toda la familia Supernova, será de unos 140 euros (en versión libre).