Los compañeros de la revista Maximum PC no han quedado muy satisfechos con el rendimiento del nuevo monitor de Dell. Nos referimos a Crystal, una pantalla de 22 pulgadas del fabricante estadounidense con un diseño cristalino (de ahí su nombre) realmente atractivo e inusual. Sin embargo, parece que su distinguido look exterior no se corresponde con las prestaciones que ofrece, que en opinión de estos especialistas apenas rozan el suficiente.
“Destroza la imagen”. Así de contundentes se muestran en su análisis cuando se refieren a los molestos reflejos que se producen en la superficie de la pantalla. Unos incómodos e inoportunos destellos que surgen especialmente cuando las imágenes son oscuras. Además, inciden en que la gama de tonos oscuros es muy pobre, perdiéndose muchos detalles en películas o videojuegos de ambientación sombría. Si combinamos ambos defectos la impresión general es que sus posibilidades están por debajo de lo que en principio se esperaba de él.
A su favor cuenta con unos colores vivos pero no saturados en exceso. También dispone de un contraste dinámico muy discreto a la vez que efectivo, ajustándose a las necesidades de cada imagen sin que su efecto se haga notorio. Otros detalles positivos que mitigan su bajo rendimiento son su resolución de 1680 x 1050 píxeles, cámara web y altavoces integrados, controles táctiles y la conexión HDMI.
Ciertamente los redactores de Maximum PC no han sido muy benévolos en sus críticas. Pero, teniendo en cuenta que el monitor cuesta nada menos que 1.200 dólares (en torno a los 780 euros), lo menos que se puede hacer es exigirle que esté a la altura de su precio. Ya se sabe, en esto de los monitores el aspecto exterior del producto no siempre es fiable, así que no es aconsejable dejarse guiar por la apariencia.
Vía: Maximum PC