La cadena japonesa de centros comerciales Aeon Co. ha puesto en marcha un proyecto insólito. Se trata de usar un robot-niñera en sus establecimientos, cuyo cometido consiste en entretener a los niños pequeños mientras sus padres hacen las compras.
La semana pasada comenzó a trabajar en uno de los grandes almacenes que la firma tiene en la ciudad de Fukuoka. El autómata ha sido desarrollado por la compañía Tmusk. Puesto que tiene que hacerse cargo de los críos, le han dado un aspecto más o menos afable para que no se asusten de él.
Con sus 42 centímetros de altura y su acabado sencillo en colores amarillo y blanco, el robot parece un juguete más que un cuidador.
De momento su vocabulario es limitado, pero es posible conversar con él. Es capaz de reconocer el nombre y la edad de cada niño leyendo el código de las tarjetas identificativas que llevan. Uno de sus ojos es en realidad un proyector que puede mostrar las imágenes grabadas con su cámara (que es el otro ojo) o anuncios publicitarios. Ya sólo le falta saber cómo se cambian los pañales y llevarlos a la escuela.
Aunque, a primera vista no es tan divertido como sumergirse en una piscina de bolas o visitar la sección de juguetes. Todo apunta a que este tipo de niñeras robotizadas comenzarán a ser habituales muy pronto (no es la primera de la que tenemos noticias). De hecho, uno de los objetivos de Aeon y Tmusk es que los pequeños se acostumbren cuanto antes a tratar con robots. En un futuro estos androides también podrían trabajar como guías de visita, o incluso ayudar a los clientes a llenar el carrito de la compra.
Vía: Ubergizmo
que secaen al robot comercio y que les conga diferentes colores y que le pongan manos asi es mejor.