Los espectadores de televisión cada vez pasan menos tiempo viendo la programación televisiva convencional. Prefieren ver otro tipo de contenidos en cualquier momento que les apetezca. Los vídeos por Internet resultan muy atractivos para los consumidores, sobre todo los servidos en streaming (sin descarga). Antes para poder visionar uno de esos vídeos, lo habitual era recurrir a un ordenador, ya fuera portátil o de sobremesa. Sin embargo, desde la aparición de los primeros televisores conectados inteligentes, eso ha ido cambiando. Los espectadores suelen preferir ver los vídeos en línea en el televisor. No es de extrañar, porque las diagonales de las pantallas de esos aparatos son bastante más grandes.
Mientras que los televisores de los salones suelen ser de entre 40 y 42 pulgadas, como poco, la pantalla de los ordenadores portátiles suelen ser de unas 15 pulgadas, llegando a 17 pulgadas en el mejor de los casos. Por otro lado, los ordenadores de sobremesa, suelen rondar las 20 pulgadas. Y las pantallas de las tabletas, de entre 7 y 10 pulgadas, son todavía más pequeñas y destinadas a un uso personal. En el último año, el porcentaje de consumidores que ven vídeos en streaming en el televisor ha aumentado. Actualmente, el televisor es la pantalla primaria para disfrutar de los vídeos en streaming, ya sean gratis o de pago, con un 45 por ciento de los usuarios encuestados; el año pasado era el 33 por ciento. En cambio, el ordenador ha decaído en los últimos meses, ha perdido diecisiete puntos para quedarse en el 31 por ciento. Esto si se suman los equipos portátiles (17 por ciento), más los de sobremesa (14 por ciento).
Todos estos datos se desprenden del último informe publicado por el Grupo NDP, una compañía especializada en investigaciones de mercado. Por otro lado, las tabletas sólo son la pantalla primaria para ver vídeos en streaming para el 1 por ciento de los entrevistados, y un 22 por ciento afirma que nunca ve vídeos en línea en ninguna clase de dispositivo. De acuerdo con el estudio, el visionado de vídeos en streaming ha pasado del dormitorio al salón, gracias a los televisores conectados a Internet. Ahora bien, los usuarios acceden a otros contenidos desde el mando a distancia del televisor, como la música y los servicios de almacenamiento en la nube.
Hay que tener en cuenta que todavía el parque de televisores conectados inteligentes no es demasiado abundante en los hogares. Según el Grupo NDP, a finales del segundo trimestre de este año, un 12 por ciento de los aparatos eran TV con capacidad de acceder a la web. Aproximadamente, en una décima parte de los hogares estadounidenses hay, como mínimo, un televisor conectado. El estudio asimismo destaca que en una quinta parte de esos hogares con televisores conectados los consumidores no utilizaban ningún otro periférico, como videoconsolas, servidores en streaming o reproductores Blu-ray, para ver vídeos de Internet en streaming. El informe del Grupo NDP se titula “Digital Video Outlook” y está referido al mercado estadounidense. Ha sido realizado en 1.200 hogares con banda ancha de Estados Unidos a través de encuestas electrónicas.
