Ya está disponible la nueva versión de Firefox. El navegador de Mozilla continúa con su política de actualizaciones constantes que le ha llevado a lanzar diez versiones diferentes del programa en apenas un año y un par de meses. En esta ocasión, los cambios se centran en algunos aspectos del diseño del programa, como por ejemplo una ventana de inicio renovada o miniaturas de nuestras páginas más visitadas cuando abrimos una nueva pestaña, mientras que otros puntos como el consumo de recursos o la velocidad se han tocado menos. Te contamos cómo descargar la última versión final de Firefox de manera gratuita.
A pesar de que todavía no está presente en la página oficial de Firefox la nueva versión, Mozilla ya lo tiene disponible en sus servidores FTP. Para instalarlo, basta con iniciar la descarga del instalador (hemos pegado la versión de Windows pero se puede encontrar también para Mac y Linux). Uno de los principales puntos de cambio de esta versión es la inclusión de una nueva página de inicio mucho más limpia y sencilla. En esta página tendremos el logo de Mozilla en el centro y después una barra inferior con la que se puede acceder a las descargas, al historial, a la configuración (entre otras opciones) o restaurar la sesión anterior en apenas un click. Todo un acierto teniendo en cuenta que la tendencia general de la tecnología es moverse hacia interfaz muy intuitivas y sencillas, que no necesiten de un proceso de aclimatación.
Dentro del inicio de Firefox los ingenieros de Mozilla han decidido que no se carguen las páginas que forman la sesión anterior en un segundo plano. A partir de ahora, esta carga solo se realizará cuando restauremos la sesión, lo que acelera la carga del programa (aunque hace más lento volver a contar con las pestañas que utilizamos en la última sesión). Además de la nueva página de inicio, también se ha añadido vistas en forma de miniaturas de las páginas más visitadas por el usuario cuando se abre una nueva pestaña.
A la hora de navegar, se ha establecido por defecto un protocolo llamado SPDY desarrollado por Google que tiene como objetivo mejorar la velocidad de carga de las páginas, y que consiste en utilizar la base que ofrece HTTP y aplicar cambios muy pequeños, como por ejemplo permitir múltiples peticiones HTTP en una sola conexión, de forma que no haya que esperar a que llegue un recurso para que se cargue el siguiente.
Otro de los cambios interesantes que llegan con esta nueva versión de Firefox es la posibilidad de establecer nuevas pestañas a través de los enlaces que encontramos en las páginas. Basta con arrastrar el enlace hacia la parte superior y se establecerá una nueva pestaña. Por último, el navegador incorpora una serie de mejoras orientadas a las herramientas para los desarrolladores que mejorarán su desempeño. En definitiva, nos encontramos ante un programa que ha crecido mucho en los últimos meses y que presenta un diseño más atractivo y un rendimiento mayor. La subida de Firefox en el mercado de los navegadores durante el último mes es un indicio de que los ingenieros de Mozilla están realizando una buena labor con esta alternativa a Internet Explorer y Google Chrome.
Pues ojala también lo hayan aligerado un poco, ya que desde la versión 4 viene siendo muy pesado, tanto para navegar como en el uso de memoria, si hubieran afinado esos detalles desde hace mucho, Chrome no les hubiera comido el mandado tan fácilmente.