Hoy se ha celebrado el Día de la Internet segura. Más de la mitad de la población mundial está conectada a la red de redes. Y lo cierto es que no se trata del lugar más seguro del mundo. Cada día surgen nuevas amenazas. Y cada vez son más las medidas que los usuarios deben aplicar para navegar y moverse por la red manteniéndose a salvo.
Pero ojo, que existe una porción de la población internauta todavía más vulnerable. Hablamos de jóvenes y niños. Los pequeños cada vez hacen un uso más intensivo de las redes sociales. Así que conviene ser especialmente cautos a la hora de dejar que se conecten a su libre albedrío.
Así, a los virus y amenazas de ransomware, phishing, troyanos bancarios y demás tipologías de ataque, hay que añadir el ciberacoso o ciberbullying. La empresa de seguridad G DATA ha dado hoy una serie de recomendaciones para ayudar a adultos y niños a disfrutar de una Internet más segura.
5 recomendaciones para una Internet más segura
Conectarse de una manera más segura a Internet es posible. Pero hay que tomar una serie de precauciones que ni adultos ni pequeños deben pasar por alto. Son las siguientes:
1. Instala un buen antivirus
Es una solución imprescindible para todos los equipos que estén conectados a Internet. Hace años que hemos tomado conciencia de lo importante que es contar con un buen antivirus instalado en nuestros ordenadores. Pero en la era de los móviles, las soluciones de antivirus también deben exportarse a los dispositivos de bolsillo.
Ten en cuenta que Android es un sistema operativo mayoritario. Y que cada diez segundos surgen nuevas amenazas dirigidas a los usuarios de esta plataforma. Ahora, firmas de seguridad como G DATA ya tienen en su catálogo soluciones de seguridad para móviles. Las puedes encontrar por 15 euros al año, con protección contra todo tipo de estafas, virus y contenidos fraudulentos.
2. Actualiza puntualmente tus equipos
¿Cuantas semanas lleva esa actualización esperando a que la instales? En las últimas semanas han ido surgiendo amenazas bastante graves que los fabricantes y desarrolladores han solucionado rápidamente a través de actualizaciones. Esto es así casi siempre.
Van surgiendo amenazas y no queda más remedio que instalar las actualizaciones o parches de seguridad en cuanto estén disponibles. Es una manera óptima de protegerse contra virus, amenazas y vulnerabilidades de última generación. Acuérdate de instalar siempre estas actualizaciones, ya sea en el ordenador o en el móvil para permanecer siempre lo más protegido posible.
3. Usa contraseñas y sistemas de protección seguros
¿Cómo de seguras son tus contraseñas? Cada vez estamos registrados en más páginas y servicios. Recuerda que tus contraseñas tienen que ser distintas para cada uno de los servicios. Es importante, además, que uses claves complejas, que contengan minúsculas, mayúsculas, números y letras.
Para ayudarte, puedes usar un gestor de contraseñas. Muchas soluciones de antivirus llevan uno integrado, con el que puedes gestionar con más comodidad la gran cantidad de claves que tienes para acceder a los distintos servicios.
4. Añade controles parentales
Los más pequeños de la casa también se conectan a Internet. Así que hay que advertirles sobre las amenazas que pueden encontrarse en línea. Es importante ayudarles a distinguir entre las páginas y ofertas engañosas, de las que no lo son. Los controles parentales, también incluidos en algunas soluciones de antivirus, pueden resultarnos muy útiles para impedir que niños y adolescentes accedan a sitios web inapropiados. También para limitar el tiempo que pasan conectados a la Red.
5. Usa las redes sociales con cabeza
Mucho cuidado con aquello que compartes en las redes. Tanto tú como tus hijos debéis evitar exponer vuestras vidas en las redes sociales. No hace falta decir que no es conveniente compartir información personal. Esto incluye imágenes privadas, pero también direcciones postales y números de teléfono.
Es importante que lleves un control exhaustivo de tus amistades en las redes. Así como de las de tus hijos. Enséñales que, como en la vida real, es importantísimo no contactar con desconocidos. Y mucho menos enviar fotos, quedar con ellos en solitario o sucumbir a chantajes.