Cabify quiere evitar problemas con Hacienda y ha optado por traer a España parte de su patrimonio desde el estado norteamericano Delaware, uno de los territorios fiscales opacos del mundo. La aportación ha sido directa, con un importe total de 93,8 millones de euros. Según publica El Economista, este traspaso se ha realizado desde la sociedad Maxi Mobility Inc a la firma Cabify Mobility International SLU, que controla las filiales del grupo en otros países y tiene su domicilio fiscal en Madrid.
Los diferentes cambios que ha ido dando Cabify en su estructura tienen su explicación después de que la Agencia Tributaria haya estado investigando a la compañía. De este modo, ha realizado diferentes acciones en los últimos meses. Tal y como informan desde El Economista, el pasado mes de enero, Cabify Mobility Internacional comunicó al Boletín Oficial del Registro Mercantil que iba a convertirse en el nuevo accionista único de la filial española Maxi Mobility Spain. Esta filial dependía directamente hasta la fecha de la matriz en Delaware. De esta forma, Cabify colocaba una sociedad interpuesta entre la empresa que controla el negocio de España y la matriz norteamericana.
Los ingresos de Cabify siguen en alza
Cabify ha expandido sus tentáculos en diferentes territorios del mundo. En los dos últimos años, la plataforma ha formado ocho sociedades diferentes en distintos países latinoamericanos, en Portugal o Japón. Asimismo, sigue aumentando sus ingresos, algo que se ha ido viendo desde hace varios años a esta parte. Las cifras hablan por si solas. Al cierre del ejercicio de 2016, Cabify Mobility International, que cuenta con un único empleado, aumentó el valor de sus activos desde 6 a 101 millones de euros. A esto hay que sumar, como indican desde El Economista, que la sociedad obtuvo durante el pasado año un resultado de 210.700 euros (antes de impuestos). Es decir, casi seis veces más que en 2016.
Cabify también logró una aportación de 94 millones de euros durante ese mismo año. Además, la aportación realizada en 2016 por la sociedad ubicada en Delaware fue de 94 millones de euros. En 2015 solo fue de 450.000 euros. Aunque la compañía se ha negado a explicar el por qué ha decidido traer a España parte de su patrimonio, es cierto que en los últimos meses la Agencia Tributaria ha estado pidiendo información adicional a otras empresas. Compañías que han estado llevando a cabo este tipo de operaciones y evitan la tributación asociada.
Desde su nacimiento en 2011, Cabify ha registrado pérdidas en nuestro país de casi 10 millones de euros. Pese a ello, su crecimiento ha sido muy bueno en los últimos años. En 2016 declaró unos ingresos de 18 millones, nueve veces más que en 2015.
