La tecnología vuelve a jugar un papel importante en la crisis catalana.En este caso, las investigaciones posteriores tras el 1-O han descubierto que el gobierno de Puigdemont utilizó Bitcoins para pagar ciertos servicios que tenían que ver con la organización informática del referéndum.
Según informa El Mundo, los gastos más importantes fueron dirigidos a dos grandes empresas, Amazon y Google. La empresa de Jeff Bezos recibió el pago por el software que gestionaba el recuento de votos del 1 de octubre, mientras que Google fue contratada para garantizar la seguridad informática del evento, a través de su programa Proyect Privacy Shield. En los dos casos, el pago fue realizado en Bitcoins.
¿Por qué usar Bitcoins?
Recientemente hemos hablado del éxito de las criptomonedas en el panorama actual. Mientras que su principal valor se encuentra en la especulación financiera, la moneda virtual sigue teniendo utilidad en el consumo. Especialmente, si se trata de prevalecer el anonimato.
Las criptomonedas garantizan opacidad a la hora de conocer los datos exactos de los pagos, lo que dificulta el rastreo e imposibilita conocer a los agentes pagadores. Es por eso que el Bitcoin sigue teniendo su principal feudo en el mercado negro y la financiación de actividades ilegales.
Google y Amazon, llamados a declarar
Como la celebración de este referéndum es ilegal, y presuntamente se utilizaron fondos públicos, estas contrataciones se han incluido como parte de la investigación por parte de la Guardia Civil. Por ello, tanto representantes de Amazon como de Google serán llamados a declarar por estas contrataciones.
En ambos casos, la citación a juicio tendría como punto clave el hecho de que ambos servicios estaban directamente relacionados con la celebración del referéndum, y las dos empresas habrían sido informadas del contexto en que eran contratadas.
El caso del Privacy Shield de Google parece más severo, ya que para poder solicitar este servicio de escudo anti-sabotajes informáticos, se debe enviar un informe completo a la sede de EEUU, lo que se hizo, con una valoración positiva por parte de Google.
La tecnología y la política están cada vez más entrelazadas, y es muy difícil explicar una sin entender la otra. Veremos hasta dónde le salpica la responsabilidad a Google y Amazon, sobre todo (y precisamente) al tratarse de pagos blindados por la opacidad de los Bitcoins.
