Elegir entre auriculares con cables o sin cables a veces es complicado. Quizás tenemos unos buenos auriculares con cable, nos gusta su sonido y estamos cómodos con ellos puestos. Pero queremos escuchar la tele pudiendo movernos libremente. O el equipo de música, y tampoco queremos estar atados a su lado. Y muchos auriculares sin cables, o no nos gusta su sonido, o no son cómodos… Sennheiser nos ofrece una solución: su Flex 5000 es un sistema para auriculares con cable que nos libera de ataduras. Cuesta 200 euros (y trae de regalo unos auriculares MX 475).
Sin cables
El Flex 500 de Sennheiser es un sistema con una base y un compacto receptor. A la base podemos conectar el televisor o el equipo de música, o ambos. Cuenta con dos entradas, una digital óptica (perfecta para la salida de muchas teles planas). También tiene una analógica tipo jack de 3,5 mm para la salida “tape” del equipo estéreo.
El receptor es un pequeño objeto con batería. Mientras está sobre la base, su batería se carga (dura unas 12 horas). Al cogerlo, se activa la transmisión inalámbrica propia de Sennheiser cuya calidad es superior a otros sistemas. El receptor cuenta con una salida jack estéreo de 3,5 mm (como un móvil) a la que podremos conectar nuestros auriculares favoritos. O los MX 475 que vienen en el paquete, unos excelentes intrauriculares.
Sonido mejorado
La transmisión por radiofrecuencia propia de Sennheiser ofrece más calidad y alcance que el Bluetooth por ejemplo. Son hasta 30 metros, y la transmisión no tiene pérdidas de resolución por compresión. Además, el Flex 5000 ofrece hasta tres modos de sonido que podremos elegir en la base a nuestro gusto o según la música o programa que escuchamos.
Uno está precisamente dedicado a reforzar las frecuencias de la voz humana, para entender mejor los diálogos. El receptor cuenta con un botón que permite seleccionar le modo elegido, o una escucha directa. Sobre la base también es posible ajustar el balance (equilibrio izquierda-derecha) del volumen. Perfecto, para escuchar la tele o la música a nuestro gusto y no molestar a nadie.