El fabricante de aviones Airbus tiene preparadas varias soluciones para la movilidad urbana que, no podría ser de otra forma, usarán el aire como vía de escape de los atascos: Tom Enders, CEO de la empresa, ha declarado que para finales de este año 2017 se podrá hacer la primera exhibición de su coche volador, un vehículo aéreo unipersonal para escapar de las congestiones de tráfico.
El plan de mejora de la movilidad del Grupo Airbus, que es el segundo en importancia mundial en la industria aeronáutica sólo por detrás de Boeing, comprende tres campos de acción: el transporte individual, que podrá reemplazar o complementar el coche particular, también una serie de drones para llevar paquetes (que ayudarán a descongestionar eliminando parte del tráfico de reparto), y por último unos “autobuses” autónomos.
Del suelo al aire
Y es que según las previsiones de la propia Airbus, el año 2030 el 60 por ciento de la población vivirá en ciudades (hoy ronda el 50 por ciento). Enders lo ve así: “hace cien años se decidió enterrar el transporte urbano, llevarlo bajo el suelo, pero ahora tenemos los medios para invertir esta situación y aprovechar el espacio que tenemos por encima del suelo. Todavía estamos en la fase experimental, pero nos tomamos este desarrollo muy en serio: de esta forma se ahorrarían millones en infraestructura terrestre porque no harían falta tantos puentes, carreteras ni túneles”.
Enders, recordemos CEO de Airbus, subraya la experiencia de su empresa en la fabricación de helicópteros y aviones, así como en las posibilidades del pilotaje autónomo y la inteligencia artificial de los drones no tripulados: “este tipo de transporte está apenas naciendo pero va a ser muy importante y tenemos que meternos en él si no queremos quedarnos fuera del negocio”.
Proyecto en marcha
El concepto de “coche volador” de Airbus ya existe, se llama Vahana y es un monoplaza autónomo: ése es el que Enders quiere poder ver volando a final de año, y según el jefe de la división Rodin Lyasoff es perfectamente posible.
“La mayor parte de las tecnologías necesarias ya existen: las baterías, los motores y la electrónica de control. Ahora hay que desarrollarla más, en la misma dirección que está evolucionando la tecnología de ‘detectar y evitar’ que se está utilizando para los coches autónomos terrestres. Pero la mayor parte de subsistemas de Vahana ya está en fase de pruebas”.
La plataforma Vahana, una vez desarrollada, tendrá más sentido en un uso de “car-sharing” (compartido) que como vehículo privado, lo que también ayudará a minimizar la congestión. Aún así esperan una demanda de millones de vehículos a nivel mundial, a largo plazo: “y en sólo 10 años podremos ya tener productos en el mercado que revolucionarán la forma de desplazarse para millones de personas”.
Reparto y autobús
En cuanto a los drones de reparto, que se llaman Airbus Skyways, no significa que Airbus vaya a entrar en el mercado de la distribución de paquetería sino que ven a vendedores como Amazon o especialistas como DHL o UPS como sus potenciales clientes.
El proyecto de transporte de pasajeros se llama por su parte, muy apropiadamente, CityAirbus: será un autobús volador eléctrico cuyo diseño actual es secreto pero llevaría varias hélices y se parecería por lo tanto a un dron. En una primera fase los CityAirbus llevarían pilotos humanos, para mejorar la aceptación, pero el plan a largo plazo es que sean totalmente autónomos. Por supuesto esto tendrá que esperar a que se desarrollen y aprueben las leyes que permitan el transporte de pasajeros sin piloto.
Pero Airbus no quiere esperar a que sean otros los que se adelanten en el futuro negocio de los vehículos voladores de nueva generación: “este mercado va a desarrollarse de forma rápida una vez que seamos capaces de introducir los primeros vehículos en las ciudades grandes, y podamos demostrar sus ventajas en movilidad, silencio y ausencia de emisiones, a precios competitivos”.